El ejército de China logró una tecnología inédita que deja en pañales a Starlink: control de todo el espectro electromagnético

Un equipo de científicos militares chinos afirma haber desarrollado un dispositivo de vigilancia militar que puede detectar y analizar cualquier señal electromagnética en tiempo real, dejando al enemigo sin posibilidad de ocultarse en el campo de batalla.

Según los investigadores, este dispositivo es capaz de cubrir un amplio rango de frecuencias, desde las ondas de radio amateur hasta los satélites Starlink de Elon Musk, y de procesar una enorme cantidad de datos con rapidez y precisión. Los detalles de esta tecnología innovadora fueron publicados por el profesor Yang Kai, líder del proyecto y científico del laboratorio de biotecnología de radiación de la Academia de Ciencias Militares de Beijing, y su equipo en la revista académica china Radio Communications Technology el 17 de enero.

China crea un dispositivo de vigilancia militar revolucionario para la guerra electrónica

En el artículo, Yang escribió que el nuevo dispositivo de vigilancia del espectro electromagnético es “pequeño en tamaño, alto en rendimiento y bajo en consumo de energía”. Debido a la complejidad del procesamiento de datos en el calor del combate, esta tecnología se consideraba hasta ahora un sueño imposible. Los científicos dijeron que provocará “un cambio profundo en el arte de la guerra”.

China y Estados Unidos están actualmente inmersos en una intensa lucha por el dominio del espectro electromagnético. En los últimos meses, los radares meteorológicos civiles en el mar de China Meridional han reportado misteriosas interferencias, lo que ha llevado a algunos expertos militares a sospechar que se estaba produciendo un enfrentamiento encubierto entre las fuerzas navales chinas y estadounidenses. Aunque todavía no se han disparado balas ni bombas, el campo de batalla electrónico ya está en llamas.

Pero mientras que China estaba en desventaja, ahora parece estar ganando terreno, con informes de que su ejército se está volviendo más agresivo. Los medios de comunicación estatales chinos informaron el mes pasado de que su avanzado destructor Tipo 055 había bloqueado por sí solo el avance de todo un grupo de ataque de portaaviones estadounidense, algo que era impensable en el pasado.

Aunque puede haber elementos exagerados en la propaganda china, los oficiales y soldados entrevistados revelaron un detalle importante: habían activado equipos emisores de electromagnetismo, incluyendo radares de alta potencia de matriz en fase, y habían fijado en su mira una serie de objetivos, incluyendo los aviones basados en portaaviones de Estados Unidos, en el concurso ofensivo y defensivo de la guerra electrónica.

El dispositivo de vigilancia del espectro electromagnético desarrollado por el equipo de Yang podría darle a China una ventaja decisiva en este escenario, según los investigadores. El dispositivo puede detectar y bloquear las señales enemigas a una velocidad sin precedentes, descifrar los parámetros físicos de estas señales casi al instante y suprimirlas eficazmente, al mismo tiempo que garantiza el flujo fluido de sus propias comunicaciones.

El equipo de Yang también menciona que el nuevo dispositivo chino puede detectar sin problemas cualquier señal en la zona de gigahercios, que abarca desde las ondas de radio amateur hasta los satélites Starlink de Elon Musk.

El dispositivo también puede identificar las fuentes de las señales, como los radares, los sistemas de navegación, las comunicaciones o los sistemas de armas, y proporcionar información valiosa para el ataque o la defensa. Además, el dispositivo puede adaptarse a las condiciones cambiantes del entorno electromagnético y ajustar sus parámetros de forma inteligente, lo que aumenta su fiabilidad y precisión.

Los científicos dijeron que el dispositivo es el resultado de años de investigación y desarrollo, y que ha superado las pruebas de campo y de laboratorio. Afirmaron que el dispositivo es el primero de su tipo en el mundo y que tiene un gran potencial de aplicación en diversos campos, como la seguridad nacional, la exploración espacial, la astronomía o la medicina.