Tras la renuncia de Steve Ballmer los conflictos en Microsoft parece ser que cada día se agudizan más y más, ya que ahora tres de los principales 20 inversores de la compañía han pedido al consejo directivo que Bill Gates sea sustituido de su cargo como presidente de la junta directiva.
Aunque Bill Gates todavía es dueño del 4.5% de la compañía (algo así como 277 mil millones de dólares) este anuncio, sin duda, muestra que Microsoft espera hacer grandes cambios próximamente. De hecho, tras el anuncio las acciones de la compañía no registraron ningún cambio radical, al contrario, siguen con un crecimiento en su valor.
Quienes quieren a Gates fuera de la empresa han asegurado que él podría bloquear el desarrollo de nuevas estrategias y limitar el poder del próximo presidente ejecutivo. Principalmente por qué el mercado de los móviles sigue creciendo y próximamente podría reemplazar al de las PC's, por lo que los productos Windows y Office deberían, en breve, sufrir una adaptación para acercarse a los nuevos consumidores.
Es importante mencionar que Bill Gates, desde que abandono Microsoft, comenzó un proceso para vender todas sus acciones en varios años, de tal forma que para el 2018 debería estar sin ninguna acción que lo relacione con la compañía que fundó en 1975.
Fuente | Reuters
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