Las imágenes recientes de Google Earth han permitido revelar la construcción de una nueva instalación rusa, que utiliza un elaborado sistema láser para inhabilitar de forma permanente satélites adversarios.
Según detalla The Space Review, donde se publicó inicialmente el reporte, la construcción se está realizando en la instalación espacial Krona del Ministerio de Defensa, cerca de Zelenchukskaya en el extremo suroeste de Rusia, donde se ubica el radiotelescopio RATAN-600.
Este complejo salió a la luz a partir de una investigación que analizó imágenes satelitales públicas, así como documentos de solicitud de contratistas industriales e informes financieros rusos.
Así es la instalación antisatélites rusa
El proyecto, de nombre Kalina, según los documentos financieros, es un sistema láser que puede cegar permanentemente los satélites adversarios, emitiendo pulsos láser tan brillantes como para dañar los sensores ópticos. Esto difiere de otros láseres conocidos que también son deslumbrantes, pero que solo incapacitan temporalmente sus sistemas.
La investigación sugiere que a pesar de planearse desde hace muchos años, Kalina solo se puso en construcción recientemente en un complejo espacial existente que opera el Ministerio de Defensa ruso, donde se encuentran sistemas de radar y LiDAR que buscan ayudar a identificar objetivos para los telescopios espaciales.
La instalación cuenta con un sistema de seguimiento separado con óptica adaptativa para ayudar a mitigar mejor las perturbaciones atmosféricas, así como otro sistema de transmisión-recepción para medir la luz láser reflejada desde su objetivo.
Un problema que ha crecido en los últimos años
Ya en 2021 el general David D. Thompson, subjefe de operaciones espaciales de la Fuerza Espacial de los Estados Unidos había alertado que los satélites estadounidenses se encontraban constantemente bajo ataque de una gran cantidad de formas.
Esto se mostró en las denuncias hechas por Elon Musk en mayo de 2022, señalando que Rusia estaba intensificando sus esfuerzos para bloquear e interrumpir las señales de los satélites Starlink de SpaceX, luego de que se enviaran terminales a Ucrania para reestablecer la comunicación.
Además otro caso que apunta en la misma dirección es el de China, que había estado desarrollando una serie de métodos para poder hacer que algunos de estos satélites "perdieran sus funciones", pues podían usarse para atentar contra la seguridad nacional del país.
Es posible que con el sistema Kalina, Rusia esté apuntando a esta finalidad de eliminación "suave", tal y como detallan en la investigación china. La eliminación dura, por otro lado, consiste en destruir físicamente el objeto en el espacio, que también ya se ha hecho en varias pruebas ASAT (Anti-SATellite weapons), lo que ha dejado miles de escombros en órbita, algo que claramente se quiere evitar, al menos con esta instalación.
Imagen: La nave espacial Soyuz TMA-19 sale de la Estación Espacial Internacional el 25 de noviembre de 2010 | NASA
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