China puso en órbita el primer módulo de su estación espacial la semana pasada, pero el lanzador y cohete utilizado en la misión llegaron a la órbita y se dirige lentamente de regreso a la Tierra.
El sitio SpaceNews dijo que se espera que los restos vuelvan a ingresar a más tardar en una semana aunque indica que "será uno de los casos más grandes de reentrada incontrolada".
Potencialmente pueden aterrizar en un área habitada.
Reentrada impredecible
El núcleo de March 5B entrará en la atmósfera de la Tierra en los próximos días aunque también algunos de los restos pueden caer en el océano.
Según el sitio, la velocidad de este proceso de reingreso depende del tamaño y la densidad del objeto, así como de las variaciones y fluctuaciones atmosféricas, que a su vez están influenciadas por la actividad solar y otros factores.
Los radares terrestres utilizados por el ejército estadounidense para rastrear naves espaciales y otros objetos en el espacio fueron los primeros en detectar el objeto e identificarlo como el cuerpo del cohete Long March 5B.
Según sus datos, los restos son de aproximadamente 30 metros de largo y cinco metros de ancho.
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