Steve Jobs, además de ser conocido por su papel como cofundador de Apple, también era identificado por su visión única y su forma poco tradicional de realizar negocios, especialmente si estos estaban enfocados en tecnología.
Jobs creía saber lo que la gente necesitaba, algo que se reflejó en su personalidad y sentido de la estética, algo que logró llevar al éxito a Apple, pero detrás del genio, había una persona a la que se le hacía difícil convivir, que se tradujo en perder su puesto en la marca de la manzana a pesar de ser uno de los fundadores.
NeXT y el regreso de Jobs a Apple
Tras este episodio, Jobs decidió crear una empresa competidora, donde se dio uno de los momentos más cuestionado de su vida relacionado con el logotipo de su nueva compañía, NeXT, por el que gastó 100,000 dólares, una inversión que ha generado polémica y planteado dudas sobre el valor real que este tenía.
Inicialmente NeXT no tuvo éxito a pesar de su producto estrella, una computadora cúbica donde Jobs invirtió la cantidad de 650 mil dólares en un molde específico que permitía lograr esquinas perfectamente rectas de 90 grados, a un nuevo nivel de precisión y meticulosidad.
Este equipo no se vendió en grandes cantidades, pero contaba con un gran sistema operativo, a tal punto que Apple decidió comprar la compañía para recuperar la propiedad intelectual del software, lo que le permitió a Steve Jobs volver a su empresa original.
El precio del logo
Regresando al logotipo de NeXT, este costó los 100,000 dólares sobre todo por que Jobs pagó por la creación del mismo, se usara o no.
Afortunadamente este no es el logo más caro de la historia. Por ejemplo el de la BBC llegó a los 1.8 millones de euros, mientras que el de BP alcanzó los 210 millones de dólares.
El encargado de hacer el logo de NeXT fue Paul Rand, un reconocido diseñador que antes trabajó para empresas como Ford, IBM o ABC, siendo un referente en la creación de logotipos icónicos.
Al ser contratado para hacer la imagen de NeXT, entregó un libro de 100 páginas donde se detallaba el proceso creativo paso a paso.
En una entrevista Jobs detalló cuál había sido la interacción con Rand:
"Le pregunté si tenía opciones y él respondió: 'No, resuelvo el problema por ti y me pagas. No estás obligado a utilizar la solución. Si deseas opciones, habla con otras personas'".
Con argumentos como ese es posible justificar el trabajo y el precio del mismo, aunque el cliente termine por no utilizarlo en ningún momento, aunque Jobs estaba dispuesto a hacer el gasto ya que Rand había trabajado ya para otras compañías.
De momento queda a consideración del usuario si un cubo con la palabra NeXT escrito dentro realmente valió el pagar los 100,000 dólares.
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