El mundo ha cambiado. La pandemia llegó a modificar mucho de lo que conocíamos y nos puso ante una situación sin precedentes donde era necesario adaptarse o morir. De todas los sectores afectados, uno de los más golpeados fue el de la industria de las reuniones, la de los eventos presenciales, las expos, congresos y convenciones, las cuales ahora están buscando cómo adaptarse a esta "nueva normalidad".
Entonces ¿es posible que los eventos abarrotados de personas puedan seguir subsistiendo en esta era post COVID-19? En Xataka México tuvimos la oportunidad de entrevistar a Manuel Redondo, presidente de Fira Barcelona México, quien nos contó cómo se preparan para esta "nueva normalidad" y cómo ve la industria de las reuniones y eventos en México.
La "nueva normalidad" de los eventos presenciales
Hola, Manuel, ¿cómo ves la situación actual, donde ahora parece que todo ha cambiado radicalmente?
Pues sí, yo te diría que si hay cosas que ya venían cambiando pues esto auténticamente las ha acelerado muchísimo, particularmente ya lo sabes, nuestro sector ha sido una de las industrias más golpeadas y de las primeras. Creo que a nivel mundial un factor clave para darnos cuenta de que esto no era una ola grande sino un tsunami fue cuando en Barcelona se anunció la cancelación del Mobile World Congress, todo el mundo vimos que esto era muy mucho más complejo de lo que parecía.
El Mobile, como bien comentas fue el primer evento grande e importante que tuvo una cancelación y además había rumores que se cancelaba que no se cancelaba y que iba a representar un impacto económico enorme para Barcelona y para todo el sector tecnológico al ser uno de los más importantes. ¿Cómo se vivió esto desde dentro?
El evento no es propiedad de Fira Barcelona, es organizado por la GSMA. Se ha extendido el contrato por otros años más en Barcelona y particularmente se realiza en Fira Barcelona, así que por supuesto que está completamente vinculada al evento y además sufrimos igual que gran parte de la industria, pues los efectos de la cancelación fueron mundiales. Particularmente en el Mobile, se quedaron más de 40,000 habitaciones reservadas y más de 2,000 stands prácticamente ya construidos, así como toda la cancelación de vuelos... en fin todo lo que implica dejar de hacer un evento profesional de cuatro días con más de 110,000 acreditados. El impacto particularmente para Barcelona, según algunas cifras, fue de más de 500 millones de euros.
Nosotros particularmente en Fira Barcelona hemos emprendido y acelerado una serie de trabajos que ya los veníamos haciendo, a partir de esta crisis hemos apurado para poder ofrecer eventos que son presenciales pero que ahora deben de tener un alcance remoto que puedan ser aprovechados y con una experiencia que vaya más allá de solamente las conferencias. Una experiencia para los acreditados en remoto que les permita seguir manteniendo los valores de un evento como los que organizamos, eventos de diferentes sectores donde las conferencias y la zona congresual también generan vínculos comerciales, donde el acreditado en remoto puedan ir a visitar de manera virtual los stands de los expositores, hacer networking y generar vínculos de negocios que, al final de cuentas, van a generar que muchas de las industrias puedan reactivarse mucho más rápido.
Yo creo que ese sería gran parte del valor que tenemos que seguir generando como industria de reuniones y todo esto sería imposible siquiera pensarlo sin las nuevas tecnología, particularmente sin las tecnologías digitales.
Hemos visto estos últimos meses cómo casi todo se ha ido al streaming y se han dejado de lado los eventos presenciales. ¿Entonces tú crees que en un futuro se adopte un nuevo formato que tenga las bondades de ambos sistemas? Es decir, el streaming y el presencial ¿o crees que se va a ir hacia un lado o hacia el otro?
No, de hecho nuestro evento en Mérida en octubre, el Smart City Expo Latam Congress será el primer gran evento con dimensión latinoamericana con este formato híbrido, evento que seguirá siendo un acontecimiento presencial con muchos actores relevantes, muchos tomadores de decisiones, este caso dentro del contexto latinoamericano que tienen que ver con transformación e innovación de nuestras ciudades y nuestros territorios, y que ahora mismo después de esta crisis será muy importante poderlos reunir para avanzar mucho más rápido en todos los retos que nos va a dejar la crisis sanitaria en América Latina.
¿Por qué los eventos deben de seguir siendo presenciales? De alguna forma la esencia de lo que hacemos nosotros como seres humanos es reunirnos, encontrarnos, mantenernos viéndonos a los ojos. Y ya en el plano comercial y en el plano de relaciones y colaboración de negocios, es mucho más complejo acordar una nueva colaboración, ahora mismo hay que replantear los propios modelos de negocio de muchas industrias, es mucho más complicado hacerlo de manera remota. Y ahí es donde también está un factor clave en estos encuentros con todas las nuevas medidas, que es el otro gran reto con todos los nuevos estándares de medidas sanitarias, y que nosotros por supuesto estamos tomando en todos nuestros eventos tanto en Europa como en el resto del mundo y particularmente aquí en México, sigamos encontrándonos para tener estas reuniones presenciales, insisto con todos estos nuevos estándares y protocolos sanitarios, y también por supuesto teniendo un gran brazo digital con plataformas que te permitan generar todas estas experiencias a los acreditados en remoto.
¿Entonces crees que este formato de evento híbrido llega para quedarse, incluso en la era post COVID-19?
Absolutamente. De hecho es un formato para la era post COVID-19, ya que en la era de la propia crisis sanitaria es obvio que las reuniones de todo sentido las tenemos que evitar. Pero en la era post COVID-19 donde estos protocolos que se van a implementar en todos sentidos en los lugares públicos, en los centros de reunión, en los restaurantes, los centros comerciales, en los museos, en fin... con estas nuevas características, por supuesto que tenemos que regresar a acordar, a vernos, a reunirnos, y particularmente en estas industrias, pero teniendo, por supuesto, una opción de llevar esto de manera remota, porque incluso a nivel de vuelos también van a tardar en reactivar.
Digamos hay una circunstancias en donde hay que mantener la comunicación, la vinculación, ya sea de manera presencial o de manera remota, entonces son formatos que llegaron para quedarse.
¿Y no crees que afecte en cierta medida? Ya que tal vez ahora las marcas prefieran ya no enviar a tantas personas y bajen la afluencia presencial, y esto afecte económicamente a los recintos o la visita de personas a reuniones porque ahora ya todo se puede hacer vía online.
Por supuesto, va a ser un proceso, ahora en la época post COVID-19, inmediatamente después de terminar esta crisis sanitaria, seguramente habrá muchísimas restricciones para viajar, pero al final de cuentas, insisto, somos seres sociales y en algún momento hay cosas que llegaron para quedarse, pero al final de cuentas nos tenemos que volver a encontrar en todo sentidos y en todas las industrias.
Hay casos exagerados en donde dicen que los restaurantes ahora van a tener que convertirse solamente en 'delivery', pero en algún momento, por supuesto con las nuevas condiciones sanitarias, tendremos que regresar a comer juntos. Esto no significa que el 'delivery' lo volvamos a dejar en segundo plano. Yo creo que debe haber una modulación en todos sentidos.
La gran reflexión, no nada más a nivel de nuestra sociedad, es que tenemos que pensar y decir, de todo lo que nos ha dejado esta crisis sanitaria, ¿con qué nos queremos quedar?, y de lo que ya teníamos antes ¿qué es lo que extrañamos y lo que queremos recuperar de mejor forma? Y realmente hacer una modulación, cuando lo llevamos a la industria de las reuniones pues son precisamente los eventos híbridos, por supuesto que queremos seguirnos reuniendo, que nos queremos seguir viendo, que queremos seguir de manera presencial acelerando todos estos procesos de reactivación económica de muchas industrias. Pero todo esto con los mínimos riesgos sanitarios, cumpliendo todos los protocolos y todos los estándares, y también llevando toda esta oportunidad de manera remota a través de las tecnologías digitales a quien no puede viajar y que está en otra parte del mundo también aprovechando lo que está sucediendo en ese acontecimiento.
Ya que comentas lo de las tecnologías, nos dices que Smart City Expo va a ser un primer evento que va a aprovechar estas tecnologías vía remota y vía presencial, ¿qué tecnologías son, nos puedes adelantar algo de esto?
Te respondería en dos sentidos. Va a ser el primer evento de dimensión latinoamericana con estas características, que va a poder cumplir, por un lado como decíamos, con un evento presencial que se va a desarrollar del 13 al 15 de octubre en Mérida, y que también tendrá su propia plataforma digital para llevar el evento en remoto. Este evento en remoto va a permitir estar disfrutando de la convención, de todas las conferencias con más de 400 ponentes entre el programa principal y los eventos paralelos de nuestros aliados. Durante tres días estarán hablando de innovación y de tecnología para nuestros territorios y nuestras ciudades post COVID-19.
Y través de la plataforma digital se podrá estar disfrutando de todas las conferencias y muchas de éstas son de manera paralela, entonces hay que tener unas capacidades para que te puedas estar moviendo durante esos tres días haciendo las visitas virtuales a muchas de estas salas. Son más de ocho salas donde se están desarrollando todos estos diálogos y todos estos paneles. Esta plataforma también podrá permitir que el acreditado remoto pueda visitar los stands virtuales de los diferentes 'partners' y de los diferentes expositores, que pueda estar vinculándose directamente con muchos visitantes también al evento, haciendo networking y teniendo charlas virtuales durante el evento.
¿Esta plataforma digital estará disponible para cualquier persona o sólo para los que compraron un boleto o cómo funcionará?
Sí, es un evento para profesionales tanto del sector público como del sector privado, academias que están vinculadas a la innovación urbana, territorial y a la tecnología. En la última edición, que fue en la ciudad de Puebla en 2019, tuvimos 13,000 acreditados y en esta edición seguramente tendremos mayor número de acreditados tanto de manera remota como presencial. Cualquier persona se puede inscribir y podrá tener la oportunidad de ir de manera presencial o de conectarse de manera remota.
Entonces, ¿un estudiante universitario al que le interesan estos temas puede inscribirse en el sitio y conectarse vía remota aunque esté por ejemplo en Tijuana?
Es correcto. Y además tenemos muchísimas becas para universidades, colaboramos con las principales universidades en México y América Latina. Particularmente para los estudiantes siempre hay becas con muchas de estas universidades para poderse conectar sin costo.
¿Tiene costo inscribirse?
Sí, para los profesionales sí tiene costo. Pero bueno, hay muchísimas becas sobre todo para las universidades.
¿Y cuál es el papel de México en todo esto? ¿Lo ves capaz, ves que el país tenga la capacidad para adoptar este tipo de formatos para eventos locales, no tanto como este Smart City Expo que es más grande y dirigido a Latinoamérica?
Me estás diciendo algo fundamental, y es que yo veo hoy una oportunidad más que nunca en replantear nuestro modelo y toda la industria de reuniones en México, una industria donde hay muchos organizadores con muchísima experiencia que son reconocidos, gente y empresas de muchísimo valor que están planteando el desarrollo de nuestra industria de reuniones más desde lo local y desde lo regional.
Yo creo que hay una gran oportunidad, si uno de repente compara estos eventos profesionales, estas reuniones de los sectores con otras regiones en el mundo, particularmente en Europa, y vemos lo que sucede en México, en México tenemos grandes eventos, pero no hemos terminado de desarrollar estos eventos de industria, eventos de sectores económicos más a nivel local, a nivel regional, a nivel de estado de, digamos, una ciudad.
Yo creo que ahí hay una gran oportunidad en dos sentidos: uno porque me parece que podemos generar mucho valor económico, en esta reactivación que todos necesitamos, haciendo eventos, haciendo reuniones más locales de sectores específicos, que cada una de estas regiones necesiten de acuerdo a su vocación económica. Y por el otro lado, con todas estas circunstancias sanitarias, van a permitir que los visitantes puedan tener una percepción de mayor seguridad sin tener que moverse en un avión, sin tener que alojarse en un hotel durante una semana para ir a un evento, digamos, más masivo y más regional, sino eventos locales donde no necesariamente se tiene que viajar, ya que todo se puede hacer de manera más local. Yo creo que es una de las oportunidades que como industria tenemos que ver, y que los propios sectores económicos regionales está necesitando para reactivar su propia economía.
Claro, las empresas tienen que mirar hacia ese lado, el cual habían ignorado durante varios años, y ahora lo hacen más por necesidad y por urgencia. ¿Estamos preparados? ¿Crees que tenemos esa capacidad, a nivel técnico, para llevarlo a cabo?
En realidad yo creo que si no tenemos esta capacidad de resiliencia en sectores como el nuestro, que ha sido muy impactado, pues tenemos que encontrar las nuevas formas de poder seguir generando los valores que entregamos, de lo contrario no vamos a poder subsistir. Yo creo que estamos en un momento en nuestra industria en donde confluyen dos situaciones: la gran necesidad que existe de volvernos a encontrar y volvernos a reunir para reactivar los negocios, para reactivar la actividad comercial y en donde nosotros podemos jugar un papel importantísimo; pero al mismo tiempo estas reuniones, estos encuentros, estos eventos, estas ferias que nosotros hacemos, tienen que ser en otras circunstancias y utilizando las tecnologías para que podamos hacerlas más seguras, y podamos hacerla también de manera remota.
Me parece que quien no pueda cambiar hacia este nuevo paradigma de la industria de reuniones, pues yo creo que se quedará con una oportunidad muy, muy menor de continuar su negocio.
Muchas gracias, Manuel.
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