En el pasado te hemos contado sobre las ventajas del trabajo remoto. Estudios como el de la consultora Mercer han demostrado que ofrecer la oportunidad de laborar desde casa permite a las empresas captar y retener talento, incluso desde otros puntos del planeta. Otro estudio demostró que el retorno obligatorio a las oficinas podría afectar la productividad en lugar de mejorarla.
Pese a que los datos están a favor del home office, muchos grandes empresarios continúan presionando a sus trabajadores para que se presenten en sus oficinas. Uno de ellos es Elon Musk. Recordemos que fue un gran opositor de las medidas del confinamiento en 2020, las cuales calificó como "fascistas". Por ello no fue tan sorprendente que en 2022 diera un ultimátum a los empleados de Tesla para volver a la oficina: “Si no se presenta, consideraremos que ha renunciado”.
Musk obliga a empleados de Tesla a volver a la oficina
Mediante correo electrónico, el empresario sudafricano advirtió a sus empleados que el trabajo remoto ya no era aceptable. "Se espera que todos en Tesla pasen un mínimo de 40 horas por semana en la oficina", decía uno de los correos, que fueron filtrados en redes. "Si no se presenta, consideraremos que ha renunciado".
De acuerdo con la BBC, los correos señalaban que cada trabajador debía reportarse en alguna de las oficinas principales de la compañía y "no en una sucursal remota que no tiene relación con las labores del trabajo". Según los textos filtrados en aquel entonces, Musk en persona se encargaría de evaluar cada una de las excepciones a la nueva política. Tesla justificaba esta norma diciendo que la presencial de los colaboradores era fundamental para la supervivencia de la empresa.
"Tesla ha creado y creará y producirá los productos más emocionantes y significativos de cualquier compañía en la Tierra. Esto no ocurrirá llamando por teléfono".
Ir a la oficina u olvidarte de tu trabajo
En el correo, Musk intentaba usar su propia experiencia para motivar a los empleados, especialmente a los de mayor rango, a volver a la presencialidad. "Entre más alto sea tu cargo, más visible debe ser tu presencia", decía, "Es por eso que viví tanto tiempo en la fábrica, para que aquellos en las líneas de producción pudieran verme trabajando a su lado". Para él, la presencia de los trabajadores en la empresa es lo que garantiza el éxito. "Si yo no hubiera hecho eso, Tesla hubiera caído en bancarrota hace mucho tiempo".
Cuando compró Twitter (Ahora X), el sudafricano tampoco dudó en implementar la norma de Tesla, y eventualmente fue eliminando el trabajo remoto. De hecho, esta red social tuvo una muy dura racha luego de su compra, con despidos masivos y cambios que poco gustaron a los usuarios.
Con la nueva política implementada, a los trabajadores solo les quedaban dos opciones: volver a trabajar de forma presencial o renunciar. Esto último debido a que muchos se habían mudado lejos de las grandes ciudades durante la pandemia, buscando un modo de vida más asequible.
Musk vs el confinamiento
Es bien conocida la actitud del dueño de SpaceX frente al trabajo: rara vez se toma vacaciones y, según la BBC, durante un periodo difícil para Tesla, Musk se quedaba a dormir en el piso de la fábrica.
En 2020, a principios del confinamiento, el empresario criticó la instrucción de quedarse en casa para evitar contagios. Musk comparó esta medida con "encarcelar a la gente en su casa". Acusó que se pretendía "violar las libertades de las personas de una manera horrible y equivocada". En esa época, el multimillonario también minimizaba la pandemia a través de Twitter, asegurando que "el pánico del coronavirus es tonto".
Musk llegó al extremo de desafiar las instrucciones del gobierno al reabrir la planta de producción de Tesla en California en mayo del 2020. "Estaré en la línea con todos los demás. Si alguien es arrestado, pido que solo sea yo", tuiteó.
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