Desde el martes 5 de noviembre, Rafael se convirtió en un huracán de categoría 1 y, menos de un día después, se intensificó hasta alcanzar la categoría 3 en la escala Saffir-Simpson.
Aunque no se espera que este sistema meteorológico toque tierra en México, sí ocasionará efectos en el país, especialmente en los estados de Yucatán y Quintana Roo.
Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), Rafael se encuentra, con corte a las 12:15 p.m., a 65 km al noreste de la Isla de la Juventud, en Cuba, y a 475 km al este-noreste de Cancún, Quintana Roo, desplazándose a 22 km/h hacia el noroeste.
El pronóstico anticipa que, debido a su extensa circulación, provocará lluvias e intervalos de chubascos, por ahora únicamente en Yucatán y Quintana Roo.
Se estima que esta será la máxima intensidad del huracán, ya que pasará a categoría 2 el jueves 7 de noviembre, y a categoría 1 el viernes 8 de noviembre por la tarde.
Asimismo, Rafael se convertirá en tormenta tropical el domingo 10 de noviembre mientras se dirige hacia Estados Unidos, ubicándose entonces sobre Tamaulipas.
El frío en México
Además del huracán, en México se encuentran en circulación los frentes fríos 7 y 8, los cuales provocan bajas temperaturas y rachas de viento en varias regiones del país.
El frente frío 7 permanecerá en territorio nacional hasta el viernes 8 de noviembre, momento en el cual dejará de afectar a México. Por su parte, el frente 8 se extenderá sobre la Mesa del Norte.
Este último ocasionará temperaturas mínimas de hasta -10 °C durante la madrugada en los próximos días, mientras que las máximas alcanzarán hasta 35 °C, al menos hasta el fin de semana.
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