El rescate de la vaquita marina en México cada vez luce más complicado. En conferencia de prensa José Sarukhán Kermez, coordinador de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) señaló que el proyecto enfrentó muchos problemas. Por una parte el crimen organizado en el tráfico del pez totoaba, recordemos que hace poco se decomisaron más de 800 buches en nuestro país.
Los intereses económicos de los pescadores también eran un problema, ya que tenían que cambiar de redes y mallas durante la captura de diversos peces, con la finalidad de proteger a la vaquita. Detalle al que muchos pescadores se negaron.
El poco interés de todos los involucrados provocó los problemas
También menciona que durante años fue un tema de poco interés de los gobiernos de los tres niveles en México. Reconoce que en la administración actual se han realizado esfuerzos importantes por conservar a la vaquita marina, pero hasta el momento los resultados no han sido positivos. Esperan que el próximo gobierno siga con los trabajos para la conservación de la especie.
Sarukhán recuerda que la zona en la que se encuentra la vaquita marina es en la “axila” del Golfo de California, converge con el área por donde Estados Unidos capta agua. Detalle que modificó radicalmente su ambiente y nunca se realizaron los ajustes necesarios para el correcto rescate.
Actualmente existen menos de 30 ejemplares y reconoce que con el paso del tiempo el rescate es más complicado y caro. Otro elemento es que se desconoce mucho de la biología de la vaquita, si se hubiera trabajado de la manera correcta hace años, no hubieran llegado una “crónica de una extinción anunciada”.
El objetivo del proyecto era capturar a la mayoría de ejemplares sobrevivientes para llevarlos a un refugio y lograr su reproducción. Lamentablemente cuando lograron capturar a dos vaquitas, una falleció en el traslado y otra se regresó al mar, ya que los expertos recomendaron que no podía estar separada de su madre.
Imagen | Valle de mayo
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