Desde el sábado, y hasta el miércoles 17 de abril, Ciudad de México se verá azotada por una nueva onda de calor que pronostica temperaturas de entre 28°C y 32°C. Esta es la segunda ocasión que se alzan las alertas en CDMX desde el pasado marzo, cuando la primera onda del año golpeó aún sin entrar en primavera.
La Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de Ciudad de México informó a través de sus redes sociales acerca de esta situación, y dio algunas recomendaciones para que la ciudadanía tome las precauciones adecuadas ante el intenso calor que se vivirá.
Recomendaciones para una onda de calor:
Entre los principales puntos a tomar en cuenta para cuidarse de las altas temperaturas están:
- No exponerse por largos periodos al sol, así como permanecer en lugares frescos y ventilados.
- No salir de casa sin bloqueador solar.
- Beber líquidos en abundancia.
- Evitar comer en vía pública, pues se corre el riesgo de que los alimentos se descompongan más rápido de lo normal.
- Utilizar ropa ligera y de colores claros.
- Usar gafas de sol, sombrillas, sombreros o gorras para cubrirse del sol.
- Prestar atención a nuestro entorno y tener especial cuidado con bebés, infantes y adultos mayores.
Anteriormente, también se han dado recomendaciones para mascotas, como:
- No permitir que caminen en asfalto caliente para cuidar las almohadillas en las patas de perros y gatos.
- Verificar que sus bebederos no estén expuestos al sol y cambiar el agua con frecuencia.
- Refrescar su cuerpo y cabeza con una esponja mojada.
Qué es una onda de calor
Una onda de calor, también conocida como "ola de calor", es un período prolongado de altas temperaturas sobre cierta región, el cual puede durar desde solo unos días hasta semanas. En condiciones extremas y alta exposición al calor, este fenómeno puede provocar peligros para la salud humana, así como para el medio ambiente.
Entre algunos de los motivos por los cuales se generan las ondas de calor están los bloqueos atmosféricos, cuando un patrón de presión atmosférica provoca que el aire caliente y seco quede atrapado sobre ciertas zonas del globo. También está la inversión térmica, cuando una densa capa de aire caliente queda atrapada entre dos capas de aire frío. Aunque quizás el principal motivo en los últimos años sea el cambio climático.
A lo anterior se le suma la alta probabilidad de que haya una transición del fenómeno climático de 'El Niño' al surgimiento de 'La Niña'. Ambos efectos provocan calor inusual en distintas regiones, situación marcada principalmente por el cambio en la temperatura de los océanos.