Luego de la escasez, NVIDIA tiene un exceso de inventario de tarjetas gráficas y su única opción es bajar sus precios para venderlas

En 2021 se volvió prácticamente imposible adquirir una tarjeta gráfica por el precio real, derivado de la pandemia y en los problemas para el suministro de componentes para fabricarlas.

Ahora, Jensen Huang, CEO de NVIDIA, ha dado a conocer, durante la llamada de ganancias del segundo trimestre de 2023, que la compañía se enfrenta a un "exceso de inventario" de las GPU de la serie RTX 3000 de cara al lanzamiento de la serie RTX 4000 de próxima generación a fin de año.

Para poder solucionar el problema, Huang ha dicho que la compañía comenzará a reducir la cantidad de GPUs que vende a los fabricantes de tarjetas gráficas y laptops para que estos puedan liberar su inventario. Además de este movimiento, NVIDIA también tiene contemplado reducir el precio de la actual generación, que en teoría, debería llegar a los consumidores de alguna forma.

Una tendencia a la baja para NVIDIA

A principios de agosto la compañía señaló que no alcanzarían sus proyecciones del cuatrimestre por 1.4 mil millones de dólares, derivado de la disminución de demanda de sus productos para juegos.

A pesar de que Huang en ese momento señaló que la venta total de GPUs a los usuarios había aumentado un 70% desde antes del COVID, la compañía seguía esperando que los ingresos anuales por estos productos disminuyeran el próximo trimestre.

El problema no solo impactó a NVIDIA, sino a toda la industria general de PC y componentes, que vio un aumento de precios por los temores de recesión y la gran demanda de hardware al comienzo de la pandemia.

La compañía también ha estado vendiendo menos GPUs a los mineros de criptomonedas, tanto por la caída en los precios, como en la transición de Ethereum. En este mismo tema, Collete Kress, directora financiera de NVIDIA, señaló que la empresa no puede saber en realidad en que medida la reducción de la criptominería contribuyó a la disminución de la demanda de juegos, que en realidad provenían del criptomercado y por lo que fueron multados.

Por lo pronto para los consumidores, esto representa que los precios de las GPUs deben seguir cayendo durante un tiempo, incluso después de la presentación de las RTX 4000 de nueva generación, aunque falta ver que tanto dispuestos a bajarlos estarán los vendedores finales.