Tu smartphone como GPS a 10 mil metros de altura

Son varias cosas las que puedes hacer con tu smartphone cuando viajas en avión. Algunas son leer, escuchar música, jugar, limpiarlo de apps, liberar memoria, ver fotos, entre otros. Y por si no lo sabías, también puedes seguir la ruta del avión con el móvil siempre y cuando tenga GPS.

Esta utilidad la descubrí apenas tres meses atrás pues siempre pensé que el GPS sólo funcionaba en tierra pero no es así.

Tres meses atrás viajaba de México DF a Monterrey. A los pocos minutos del despegue y luego del famoso mensaje “tripulación 10 mil pies”, prendí mi teléfono (estaba en modo de avión) para escuchar música en Google Music. Sin embargo en lugar de hacer clic en dicha app lo hice por error en Google Maps. Cuando se abrió esperaba ver el mapa de México DF pues en la memoria queda grabada la ciudad donde te ubicas.

Como me gustan los mapas decidí mantener la app abierta unos segundos y de repente comienza a moverse, deteniéndose en el clásico punto azul que describe tu ubicación. Cuando esto ocurre el zoom-in se activa automáticamente así que decidí hacer un zoom-out para ver donde me ubicaba y si verdaderamente esto estaba ocurriendo.

Para mi sorpresa Google Maps me ubicó a más de 10 mil metros de altura (obvio el móvil no me indicó altura) y se iba moviendo conforme el avión lo hacía. A partir de entonces no apague mi teléfono sino hasta que estaba permitido, así que durante el viaje pude saber por cada pueblo o ciudad que íbamos cruzando. A partir de entonces mis vuelos ya no son iguales y en los vuelos nocturnos puedo saber por dónde volamos e igualmente identificar zonas urbanas.

A continuación te muestro algunas imágenes de Google Maps de mi último vuelo, cuya ruta fue Tijuana a México DF. Cabe mencionar que si tu móvil tiene A-GPS (A por “asistido”) entonces el GPS no funcionará pues precisamente el A-GPS se apoya en las antenas de telefonía celular para ubicarse geográficamente. Al estar en modo de avión pues no hay señal entre tu móvil y las antenas.

Ahora sí, las fotos antes citadas:

Saliendo de Tijuana

Despegamos con rumbo al océano pues los vientos provenían del mar. El avión dio casi media vuelta y tomó rumbo sureste. En este momento (ver punto azul en el mapa) pude ver Ensenada y el hermoso paisaje de Baja California.

Culiacán

Luego de viajar un buen rato (hora y media según se puede ver en la imagen de pantalla) sobre el Mar de Cortés, tocamos tierra cerca de Culiacán y pasamos sobre este centro urbano. Ahora supe con precisión que se trataba de dicha ciudad.

Sierra de Durango

Durante todo el vuelo no encontramos nube alguna así que la visibilidad estuvo perfecta. Como es de esperarse en la Sierra de Durango se ven pocas luces de pueblos “perdidos”. La pregunta que siempre me hago es ¿de que vivirán tales personas?.

Aguascalientes y León

Como iba sentado en el asiento 22F (lado derecho) no pude ver de noche a Aguascalientes, pero si pude ver minutos después a León. Lástima que la foto que tomé desde el aire con mi Moto X no puede verse luz alguna de la ciudad.

Querétaro

Una vez que entramos en el corredor Aguascalientes y hasta México DF las luces de pueblos y ciudades podían verse sin parar. Las distancias a más de 10 mil metros de altura parecen ser muy reducidas. En esta posición el piloto acaba de anunciar que el descenso había comenzado.

Tula

Por supuesto no pude ver los Atlantes de Tula pues era de noche (ni tampoco de día se pueden ver) pero sí pude ver claramente la refinería de Tula lanzando sus tres grandes llamaradas.

Zumpango

Esta fue la última imagen de mi teléfono que pude tomar pues se había dado la indicación de apagarlos, lo cual es frustrante pues en EE.UU. ya permiten usar los dispositivos electrónicos menores (tablets, smartphones, etc.) durante todo el vuelo ¿Cuándo se permitirá en México?

México DF

Luego de tres horas y cinco minutos de vuelo finalmente habíamos llegado. Como el vuelo fue con Aeroméxico entonces llegamos a la T2. Por cierto, esa semana volé cuatro veces con esta aerolínea y en tres fue frustrante (mala atención, vuelo retrasado, ciertas bebidas agotadas). Pero independientemente de lo anterior, no olvides que tu smartphone con GPS puede convertir tu vuelo en algo más interesante y entretenido.