Ya recorrimos las gamas de entrada, media y media-alta con nuestros queridos recopilatorios de los mejores smartphones para comprar en México, así que es momento de cerrar el círculo analizando las opciones en la gama premium.
En este segmento no hay límite de precio, así que encontraremos lo mejor de lo mejor en cuanto a hardware. Eso sí, recuerden que nos mantenemos apegados al precio de lista, sin tomar en cuenta promociones, y únicamente dispositivos con distribución oficial en el país. La lista va así.
Galaxy S8, Galaxy S8+ y Note8
Los estandartes de Samsung encabezan esta lista. Los dos integrantes de la familia S se acercan peligrosamente a los 20,000 pesos mientras que el tercero los supera fácilmente. Por supuesto, estas exorbitantes cantidades de dinero nos brindan lo mejor de hardware: grandes pantallas, uno de los chipsets más poderosos, buenas cantidades de RAM, un diseño exquisito y poderosas cámaras, doble en el caso del phablet.
Los GS8, GS8+ y GN8 están disponibles en Telcel, AT&T y Movistar por precios de 17,299; 19,699 y 22,999 pesos, respectivamente, en sistema de prepago. Pero, también se pueden adquirir por precios menos en la renta de un plan tarifario o bien por medio de otras tiendas como Amazon, BestBuy, etcétera.
HTC U11
HTC también trajo su estandarte a México, al menos el primero, el HTC U11. Este móvil se posicionó desde su presentación como "la mejor cámara del mercado", y ese ha sido uno de los bastiones que lo han hecho brillar.
Por otro lado, no podemos olvidar la presencia del Snapdragon 835, la tecnología de sonido uSonic, y su elegante cuerpo de cristal que ahora es resistente al agua gracias a la certificación IP68. El HTC U11 es exclusivo de Telcel y tiene un costo de 17,439 pesos.
LG G6+
El LG G6+ es una versión ligeramente mejorada del G6 original. Decimos ligeramente porque tiene el mismo tamaño y resolución de pantalla, chipset, memoria RAM, cámaras y cuerpo resistente al agua de su hermano menor; en donde vemos un cambios importante es en la memoria interna que alcanza los 128 GB. Su precio es de 16,379 pesos y es exclusivo de Telcel.
Sony Xperia XZ Premium
Una gran pantalla de 5.5 pulgadas con resolución 4K y tecnología HDR es la principal característica de este estandarte de Sony, también uno de los primeros smartphones en portar el Snapdragon 835. Además, tenemos una poderosa cámara cuya principal característica es la grabación en cámara super lenta y resistencia al agua.
Quizás el diseño de este móvil sea idéntico a los Xperia de los últimos años, pero la verdad es que la tecnología de su pantalla es un punto que juega muy a su favor. Su precio es de 16,999 pesos, ya sea con Telcel o desde la tienda en línea de Sony.
Huawei Mate 10
El phablet estandarte de Huawei no tardó mucho en llegar a México. El Mate 10 es un dispositivo que no le envidia nada a ningún otro exponente de la gama premium pues cuenta con una gran pantalla QHD, el poderoso Kirin 970, y doble cámara firmada por Leica. Con un precio de 14,999 pesos en Telcel y AT&T es el segundo estandarte más económico del país, solo después del Nokia 8.
Nokia 8
El Nokia 8 es el estandarte más económico en México, pero no por ello el menos importante. El renombre de Nokia renace en este móvil con pantalla de 5.3 pulgadas QHD, Snapdragon 835, y poderosa cámara firmada por Carl Zeiss. Su precio es de 14,999 pesos y se puede comprar en Elektra.
iPhone 8, iPhone 8 Plus, iPhone X
Estos tres smartphones de Apple constituyen la antítesis de la tercia de Samsung. Dos de ellos también se acerca peligrosamente a los 20 mil pesos, mientras que el tercero los supera fácilmente; y también tenemos lo mejor del hardware que Apple potencia con la gran optimización de su sistema operativo.
Hay varias maneras de comprarlos en México, ya sea en la tienda de Apple o bien con los operadores mexicanos. Sea cual sea el caso, los precios se mantienen iguales: 16,499 pesos para el iPhone 8; 18,999 pesos para el iPhone 8 Plus y 23,499 pesos para el iPhone X, todos en sus variantes básicas.
¿Precios justos o muy elevados?
En este punto en el que actualmente nos encontramos es necesario preguntar ¿estos precios son justos o son muy elevador? Cualquiera podría pensar que la situación se nos está yendo de las manos, pero mientras hayan usuarios que puedan pagar tales cantidades sin inmutarse, la industria seguirá así.
Y no está para nada mal. Como siempre, la decisión final es de cada usuario, sus necesidades, posibilidades y gustos.
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