Un año más toca reportar el nacimiento de un nuevo buque insignia de Samsung. En este 2016 nos encontramos con la séptima generación de la icónica marca Galaxy S, una evolución del modelo del año pasado con mejoras puntuales pero necesarias para tratar de conquistar, una vez, el mercado de la gama alta.
Como sucedió con el Galaxy S6, en esta séptima generación tenemos dos modelos diferentes: el Galaxy S7 con pantalla normal y el Galaxy S7 Edge con pantalla curva. Vamos a conocer a lujo de detalle la apuesta que nos tiene Samsung para este año:
La resistencia al agua regresa a los teléfonos de Samsung
Las imágenes filtradas del terminal nos dieron un enorme adelanto de lo que nos encontraríamos. El diseño no cambia radicalmente respecto a la generación anterior, salvo las esquinas que tiene pequeñas diferencias. En general, Samsung mantiene continuidad tanto en materiales —cristal (Gorilla Glass 4 en el frontal y trasera) y metal— como en líneas de diseño.
El mayor cambio a destacar, y el cual sabemos que será agradecido por la mayoría de usuarios, es que Samsung vuelve a apostar por la resistencia al agua y polvo. Esta capacidad la vimos en el Galaxy S5, y ahora vuelve con la séptima generación, pero con mejoras.
En concreto se integra certificación IP68 que promete la mayor resistencia ante el contacto con agua. Aunque con sus respectivos matices, por ejemplo, evitará que el líquido dañe su funcionamiento, pero no se recomendará meternos a la piscina con él; algo similar a lo que otros fabricantes, como Sony, están dando como recomendación.
La novedad, respecto a la resistencia que vimos en el Galaxy S5, es que ni el puerto para auriculares ni el conector microUSB necesitan una tapa para evitar la filtración de agua.
Dos modelos, dos tamaños de pantalla
En el apartado de pantalla encontramos con dos diferentes opciones. El Galaxy S7 integra un panel de 5.1 pulgadas y resolución 2K, mientras que el Galaxy S7 Edge uno de 5.5 pulgadas con resolución 2K. Tal como lo apuntaban rumores, la diferencia de tamaño —y la integración de curvas del modelo edge— quiere justificar la diferencia de precios entre ambos modelos.
El hardware, era el que todos estábamos esperando. Habrá dos versiones de cada modelo, con diferente chipset y capacidad de batería, en concreto así quedan:
Galaxy S7:
- Exynos 8890 con batería de 3000 mAh.
- Qualcomm Snapdragon 820 con batería de 2600 mAh.
Galaxy S7 edge
- Exynos 8890 con batería de 3600 mAh.
- Qualcomm Snapdragon 820 con batería de 3000 mAh.
La memoria RAM para ambos modelos es idéntica: 4GB en formato LPDDR4, el almacenamiento será de varias versiones, aunque ahora con una “enorme” novedad. Los rumores eran ciertos, la ampliación vía microSD al regresa al móvil. Para quien se pregunta ¿dónde la vamos a montar? compartirá espacio en la bandeja de la nanoSIM.
Menos megapixeles, mayor luminosidad
El apartado fotográfico también recibe sus respectivas mejoras. Estas son posibles gracias a un nuevo sensor de doce megapixeles (sí menor resolución que el del modelo anterior) con mejor luminosidad, ahora de f/1.7, y pixeles de mayor tamaño 1.4 um.
La mayor novedad está en su sistema de enfoque. Uno de detección de fases que utiliza 100 por ciento de todos los pixeles para la detección. ¿Qué mejoras implica? un enfoque mucho más rápido que el modelo anterior.
Ambos modelos ejecutarán Android 6.0 Marshmallow de serie, con algunas mejoras puntuales en su capa de personalización. El Galaxy S7 Edge es el que mayores novedades recibirá en este apartado, teniendo nuevas funciones en sus curvas gracias a la liberación un SDK.
Precio y disponibilidad
Samsung ha revelado que ambos teléfonos empezarán su despliegue por todo el mundo a mediados del próximo mes de marzo, desgraciadamente no se ha revelado información sobre su precio, pero es de esperar que tengan uno típico de terminalesd e gama alta.
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