El Motorola One ha llegado a México como una apuesta de la compañía por el software, asegurando rápidas actualizaciones. Además, de esta manera Motorola quiere competir en el mercado con nombres como Xiaomi y Nokia que desde hace un tiempo trajeron sus apuestas al país.
Sin embargo, ¿es realmente la estrategia adecuada? Es decir, Android puro y las rápidas actualizaciones del programa One siempre serán bien recibidas, pero ¿y los demás aspectos técnicos, y la relación costo-beneficio? Estas son nuestras primeras impresiones del Motorola One.
Diseño conocido... y sorpresivamente cómodo
Muchas críticas se ha llevado Motorola por el diseño de su nuevo smartphone, y es que desde que se dio a conocer en China (bajo el nombre de Moto P30), todo el ecosistema tecnológico notó la gran similitud con el Huawei P20, que a su vez tomó gran inspiración del iPhone X.
El punto es que Motorola no se quiso quedar atrás y adoptó estas líneas estéticas que resultan conocidas para el mercado, pero no dentro de la propia compañía, pues todas sus familias de dispositivos tienen una muy marcada similitud estética.
Sin embargo, lo llamativo del Motorola One es que le salió muy bien tomar prestado este diseño. La combinación de los paneles de cristal unidos por el marco de aluminio resulta elegante a la vista y también da como resultado un dispositivo muy cómodo en mano, tanto en tamaño, manejo y, contrario a lo que se pensaría, en peso.
Motorola se acierta un punto muy valioso en el diseño, no tanto por las líneas estéticas per se, pero sí por la combinación de materiales y por la fabricación general del terminal.
Pantalla que se queda corta, pero no en tamaño
El Motorola One extiende su pantalla hasta las 5.9 pulgadas y se corona con un notch -cómo no- para entrar en la tendencia actual. Es decir, si ya tomó prestado el diseño ¿por qué no la muesca en pantalla? Sin embargo, sin tomar en cuenta esto, la pantalla es el apartado más débil de este móvil.
Si bien la pantalla tiene una diagonal bastante extensa, acorde a lo que podemos ver en el mercado actual, es en la resolución en donde se queda corta. Con 720 x 1440 pixeles, equivalentes a 720p, el Motorola One queda detrás de la competencia, y se nota. Sin muchos esfuerzo podemos ver los pixeles en la pantalla, tan sencillo como ver el fondo o bien en los iconos.
En un mundo donde la gama media tiene como estándar la resolución FullHD, sobre todo en diagonales cada vez más extensas, es extraña una opción con una resolución menor. No es malo como tal, pero si hacemos la comparación con la competencia, no sale bien parado. Este es el detalle fundamental, que no es que sea mala la resolución en el móvil sino que queda corto respecto a otros.
¿Desempeño comprometido? Para nada
El Snapdragon 625 es un viejo conocido, este chip le da vida a una gran cantidad de dispositivos de diferentes marcas, y a pesar de sus dos años de edad, Motorola ha decidido apostar por esta pieza de silicio. ¿Por qué? Sencillamente porque ha demostrado ser eficiente y con una gestión energética de lo mejor. Si sumamos 4 GB de RAM y Android One, tenemos una ecuación ganadora.
De hecho, aquí es en donde la pantalla con resolución menor entra en juego pues con un requerimiento de potencia menor y la ayuda de los complementos ya mencionamos, el Motorola One tiene todo para ejecutar cualquier tarea (dentro del rango de posibilidades de su gama) sin problemas.
Y de hecho así es, durante los breves momentos de prueba que tuvimos, el desempeño no mostró ninguna ralentización o problema. Importante mencionar que la carga de aplicaciones es mínima lo cual ayuda mucho a este desempeño formidable. Será con el paso del tiempo y la carga de trabajo que el chip -y en general el Motorola One- demostrará su músculo y comprobará si es suficiente, o no.
Estando en esto, debemos mencionar también los 3,000 mAh de la batería. No podemos decir nada respecto a la autonomía, pero teniendo en cuenta lo ya mencionado sobre la resolución de la pantalla y el poco requerimiento de potencia que representa, así como la gestión energética del Snapdragon 625, esta capacidad debería ser suficiente para más de un día de actividad. Ya veremos.
El talón de Aquiles de Motorola
Para nadie es un secreto que Motorola tiene trabajo por hacer en lo que a la cámara de sus dispositivos se refiere. No son malas, pero sencillamente están muy detrás de otros contendientes en el mercado, y la historia se repite en el Motorola One, a pesar de los esfuerzos de la compañía.
Los sensores traseros ofrecer la posibilidad de hacer tomas con efecto bokeh e incluso el desenfoque se puede cambiar después de hecha la toma, función que hemos visto en los demás dispositivos de la compañía. Otros modos como cinegrafía y selección de color también están presentes.
En realidad, la cámara es la desarrollada por Motorola, y es la única aplicación de sistema propia de la firma integrada en el dispositivo a pesar de Android One. Esta estrategia ya la hemos visto, generalmente los fabricantes (Xiaomi, Nokia) integran su propia cámara en los dispositivos One.
Dejamos a continuación algunas fotografías de prueba del Motorola One, todas en modo automático:
Finalmente, mencionar que el Motorola One también tiene modo manual que permite el control de diversos parámetros de la cámara para lograr mejores tomas. Otros modos, como grabación de video en timelapse, también están disponibles.
Android One como estandarte de batalla
Finalmente, llegamos al meollo del asunto, Android One como estandarte de batalla de este nuevo dispositivo de Motorola. Comentarios de primeras impresiones, los de siempre: el desempeño es muy fluido, la interfaz limpia y el sistema sin carga innecesaria de aplicaciones.
Será con el paso del tiempo que Android One demostrará su verdadero valor en el dispositivo, tanto en desempeño, como en las actualizaciones. En este apartado, se prometen dos updates de sistema operativo (será el primer móvil Motorola en recibir Pie y asegura la llegada del futuro Android 10), así como tres años de parches de seguridad.
Motorola quiere vender seguridad y actualizaciones con el Motorola One, y es una estrategia válida que de hecho otros fabricantes deberían seguir. No estaría mal echarle más ganas en el apartado técnico para ponerse a la par de la competencia, pero como primer apuesta llama la atención, desde la perspectiva crítica; las ventas ya dirán qué tan eficiente es a nivel comercial.
Como bien ya hemos dicho, todo será sobre las actualizaciones, más que sobre las especificaciones técnicas. Lamentablemente la anterior Motorola, la de Google, ya hacía esto, y ahora nos toca conocer la estrategia de la Motorola de Lenovo para volver a aquellos tiempos. Al fin y al cabo, todo queda en manos de Google, aparentemente.
En Xataka México | Motorola One en México: (des)afortunadamente todo será sobre las actualizaciones
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