El pasado 5 de noviembre, el conductor de un Tesla Model Y en Chaozhou, en la provincia de Guangdong, en el sur de China, aparentemente perdió el control de su auto eléctrico, lo que detonó en la muerte de dos personas y tres heridos.
Cámaras de seguridad y tráfico captaron lo sucedido: se aprecia que el conductor orilla el vehículo pero de repente acelera para después alcanzar altas velocidades, golpeando a un ciclista y varios vehículos motorizados en el camino antes de salirse de la carretera y chocar medio minuto después.
Se cree que el Model Y recorrió más de dos kilómetros a 198 km/hora. Y, aunque el conductor siguió tocando la bocina y agarrando el volante para tratar de evitar una colisión, finalmente golpeó y mató a un motociclista y una estudiante de secundaria.
Un usuario verificado en la plataforma china Weibo, similar a Twitter, que publicó bajo el título de "un miembro de la familia del conductor", afirmó que el piloto perdió el control, intentó pisar los frenos, pero al parecer un problema técnico debió ser el causante del accidente.
La familia también contó que el conductor, de 55 años, es un camionero profesional y que el Tesla Model Y era un auto nuevo que le compró a un amigo a principios de noviembre de 2022.
La policía de tránsito local respondió que el accidente aún está bajo investigación, pero ya se descartó la posibilidad de que el conductor estuviera ebrio o hubiera abusado de drogas.
En respuesta al incidente, Tesla dijo que ayudará en la investigación policial, aunque sugirió que el incidente no fue causado por un mal funcionamiento de su eléctrico.
De acuerdo con lo dicho por la automotriz de Elon Musk, en los videos existentes se puede ver que las luces de freno no se encendieron durante mucho tiempo durante la conducción a alta velocidad del vehículo, y, en lugar de eso, el acelerador estaba "fuertemente accionado" antes del accidente.
Ante la respuesta de Tesla, los familiares señalaron que le pidieron a la automotriz información relevante sobre el vehículo, pero nunca recibieron declaraciones orales ni escritas, por lo que habrá que esperar los resultados de la investigación policial para saber lo que ocurrió.