Hyundai llevará la tecnología de nuevas energías al campo de batalla. El fabricante surcoreano, a través de su filial Hyundai Rotem, anunció el desarrollo del primer tanque militar propulsado por hidrógeno, que promete ser silencioso, ágil y prácticamente indetectable en comparación con modelos diésel.
Este tanque, posiblemente denominado K3 debido al modelo K2 que remplazaría, utilizará celdas de combustible de hidrógeno para alimentar su motor eléctrico, con la intención de ser menos visible al radar enemigo. El proyecto se enmarca en una iniciativa mayor, con miras a una plataforma completamente electrificada según información de FuelCellsWorks.
La tecnología detrás del tanque K3 buscará resolver los problemas que enfrentan los vehículos de combate diésel, cuyo ruido, emisiones contaminantes y calor los hacen fáciles de identificar. Al optar por el hidrógeno, Hyundai buscará funcionamiento silencioso y sin calor detectable, lo que podría mejorar su capacidad de ocultamiento en el campo de batalla. Además tendrá la habilidad de emitir ondas de radio, lo que le permitirá eludir sistemas de radar convencionales.
Entre sus características avanzadas, el tanque K3 contará con capacidades de conducción autónoma, manejo de drones y cañón de 130 milímetros. La elección de hidrógeno permite al tanque K3 mantener alta aceleración y mejor maniobrabilidad en terrenos irregulares. Hyundai Rotem también ha optimizado su diseño para atravesar terrenos accidentados, aprovechando la potencia y eficiencia de las celdas de combustible.
Otro de los beneficios frente a tanques de guerra 100% eléctricos sería la facilidad para recargar combustible. A diferencia de los eléctricos a batería, que requieren acceso a red de carga, el hidrógeno permite suministro de energía portátil, vital en situaciones de conflicto donde la infraestructura puede ser limitada o inexistente.
Hyundai Rotem K3
Los vehículos militares de nuevas energías
La incorporación de nuevas energías en vehículos militares no es exclusiva de Hyundai. En 2022, el ejército de Estados Unidos también presentó una versión híbrida del tanque Bradley, que ahorra hasta 20% de combustible y es mucho más fácil de mantener debido a su menor número de piezas móviles.
El tanque K3 es parte de un plan para integrar tecnologías de energía limpia en vehículos de defensa, un paso alineado con las tendencias de sostenibilidad global. Con posible producción a gran escala a partir de 2040, el tanque de hidrógeno de Hyundai buscará marcar un cambio en tiempos donde el compromiso ambiental, la innovación y la estrategia militar buscan un absurdo equilibrio.
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