En 2021, un tribunal de San Francisco, California, ordenó a Tesla pagar a Owen Díaz, un extrabajador afroamericano que acusó a la empresa de habilitar un lugar de trabajo racista, 137 millones de dólares por los daños causados. Sin embargo, las apelaciones posteriores redujeron significativamente esa cantidad, quedando en sólo 3.2 millones de dólares, de acuerdo con el veredicto emitido ayer.
Díaz, quien era exoperador de ascensores en la planta de ensamblaje de Tesla en Fremont, rechazó en 2022 un segundo veredicto emitido por el juez federal de distrito William Orrick que contemplaba 15 millones de dólares de indemnización. Hoy se queda sólo con los 3.2 millones.
Según los informes, el equipo legal de Díaz le pidió al jurado la semana pasada que otorgara 8 millones de dólares en daños compensatorios y 150 millones en daños punitivos. Los abogados instaron al jurado a sancionar a Tesla, una empresa que actualmente tiene un valor de más de 600,000 millones de dólares, una cantidad que llamara su atención.
Pero el abogado de Tesla, Alex Spiro, argumentó que a Díaz sólo se le debería otorgar la mitad de su salario. Al parecer quiso dejar a Díaz como un mentiroso en la corte, pues declaró erróneamente cuánto tiempo trabajó en la planta y exageró sus testimonios y el abuso que sufrió para obtener un pago mayor.
Planta de Tesla en California
En la demanda, presentada originalmente en 2017, Díaz contó que en la planta usaban "adjetivos calificativos racistas a diario" para referirse a él, incluida la palabra "nigga" (altamente discriminatoria por la carga racial histórica que implica), que aparecieron graffitis y caricaturas racistas en su espacio de trabajo y en los baños, y que sus colegas le decían que "regresara a África".
La demanda contra Tesla fue porque los supervisores no intervinieron durante estos problemas y el estrés de la situación hizo que perdiera peso y pasara noches de insomnio, y que, incluso "algunos días me sentaba en las escaleras y lloraba", contó Diaz.
Sin embargo, es posible que el caso continúe, pues de acuerdo con Los Angeles Times, el abogado de Díaz cree que el jurado decidió otorgarle sólo 3 millones de dólares en daños punitivos y 175,000 en daños no económicos porque la defensa lo atacó erróneamente. Dijo que la estrategia de Tesla de "minimizar y desinfectar" funcionó y que ya presentó una solicitud para un nuevo juicio por "mala conducta".
Por su parte, Elon Musk celebró la decisión del juez y el jurado, y escribió en Twitter que respetaba el veredicto pero que con más pruebas, no hubieran tenido que pagar nada.
"Si se nos hubiera permitido presentar nuevas pruebas, el veredicto habría sido cero en mi opinión. El jurado hizo lo mejor que pudo con la información que tenía. Respeto la decisión".
Recordemos que ésta no es la única demanda por racismo y discriminación que tiene Tesla. En agosto de 2021, Melvin Berry, ganó una indemnización de 1 millón de dólares por parte de la empresa, después de que la American Arbitration Association determinara que la automotriz no evitó que se le llamara "nigger".
Incluso, en 2022, el Departamento de Vivienda y Empleo Justo del estado de California demandó a Tesla por acoso racista y discriminación contra los trabajadores negros de su planta de Fremont.
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