Los días de Jaguar Land Rover terminaron, al menos de nombre. A partir del 1 de junio, la automotriz inglesa de lujo se conoce oficialmente como JLR. Esto es más que una simple abreviatura del antiguo nombre, es una nueva identidad corporativa, de acuerdo con el fabricante.
Como parte de esa nueva identidad también llegó un nuevo logotipo, al igual que lo hizo Porsche hace unos días, y representa la reestructuración de la compañía, ya que separa sus tres marcas Land Rover y se prepara para el relanzamiento de Jaguar como una marca de lujo exclusiva para autos eléctricos de alta gama.
El nuevo logotipo se diseñó para, de acuerdo con JLR, canalizar la intención de la marca de encarnar un espíritu minimalista entre su presencia corporativa y de concesionario físico. Está diseñado sobre los pilares fundamentales de "elegancia, modernidad y una esencia con visión de futuro"y se combina para crear el primer logotipo que representa a la empresa en su conjunto.
Sin embargo, este nuevo logotipo no se verá físicamente en ningún modelo de JLR, sino que será la única pieza de la marca corporativa que conecta las cuatro marcas que componen el JLR moderno.
Esto porque JLR tiene la intención de crear más distancia entre las cuatro líneas de modelos principales dentro de la compañía, compuesta por Range Rover, Discovery, Defender y Jaguar.
Pero esto no disolverá la marca Land Rover, sino que hará que cada una de esas líneas de modelos sea más independiente, especializándose en cada uno de los modelos principales.
JLR también anunció una inversión de 15,000 millones de euros durante los próximos cinco años, para reconfigurar su planta de Halewood en Merseyside, Inglaterra, esto para acoplar su nueva Arquitectura Modular Eléctrica (EMA).
Originalmente, se esperaba que la plataforma fuera compatible con sistemas de propulsión híbridos, pero JLR decidió que, "a medida que aumenta la tendencia a la electrificación en ciertos mercados", EMA se volverá sólo eléctrica.
