Abogados, economistas, académicos y representantes de Uber, DiDi, Cabify, Rappi y Beat están de acuerdo: los repartidores de las aplicaciones deben tener un piso mínimo de seguridad social.
El consenso es generalizado. Tanto especialistas, como empresas y hasta repartidores parecen estar en el entendido de que la ley en México necesita crear una nueva figura de trabajadores, una que no necesariamente establezca una relación contractual entre empleado y empleador, pero que sí dote de seguridad social a trabajadores. "Seguir los paradigmas tradicionales es el camino del fracaso"; dijo Nicolás Sánchez, director de políticas públicas de Uber México, en el 'Foro Sobre Plataformas Digitales de Seguridad Social', hecho en la UNAM.
Al foro acudieron representantes y portavoces de las apps de reparto y transporte privado más importantes con presencia en México. Ahí mismo, Miguel Abad, director de asuntos públicos para Latinoamérica de Cabify dijo que el que la flexibilidad sea vista como sinónimo de desprotección "es un paradigma del pasado".
La buena noticia es que hay consenso, pero dentro del foro fueron pocos los participantes que se comprometieron con ideas precisas sobre hasta dónde estarían dispuestas a ir las empresas con tal de asegurar que trabajadores tengan prestaciones sociales. En uno de los paneles, una pregunta hecha por el público fue si aplicaciones aportarían para que trabajadores tengan seguridad social. Tonatiuh Anzures, director de asuntos con gobierno de DiDi, dijo que la empresa estaría abierta a ello. José Trejo, líder de política regional de Beat, declinó la palabra.
Compromisos y no
Hay algunos claros acuerdos en la industria. En el foro en el que participaron los portavoces de Uber y Cabify también estuvo Gustavo Gaviria, representante de la organización española 'Repartidores Unidos'. En su participación describió como un "desastre" la ley rider en España que obligó a que empresas contrataran directamente a repartidores, lo que provocó que aplicaciones cortaran relación con más del 60% de los repartidores de ese país.
"La flexibilidad es un tema que no empata del todo en la relación obrero-patronal", dijo en otro momento Anzures, de DiDi. Ricardo Barbosa, presidente de la comisión de seguridad social de COPARMEX también se dijo a favor de que la modificación legislativa prometida (que Secretaría de Trabajo dijo que estaría lista en septiembre pasado), tendría que modificar la ley del IMSS para garantizar seguridad social, mas no la Ley del Trabajo.
"Que no necesariamente se cree una relación de trabajador-empleado, pero que sí que haya un piso mínimo de seguridad social" sentenció Barbosa. Su argumento es que establecer una relación tradicional entre empleado o empleador acarrearía otras complejidades como la necesidad de crear programas de capacitación y contratos colectivos de trabajo.
En el mismo panel en el que participó Gaviria, de España, también estuvo Fernando Arab, dos veces subsecretario del trabajo en Chile. En ese país apenas en septiembre pasado entró en vigor una reforma legislativa que precisamente permite a repartidores y conductores decidir entre una relación convencional entre empleado o empleador, o bien, una relación más independiente a fin de mantener la flexibilidad de que el trabajador decida cuándo y cómo trabajar. En ambos casos se garantiza un piso mínimo de prestaciones.
Poco se habló del tema de aportaciones, hasta cuánto darían las empresas por trabajador, cuánto correspondería a gobierno y cuánto a trabajadores. Según un informe de Oxfam, no todo los repartidores en México quieren seguridad social debido a las deducciones adicionales que les serían hechas a sus ingresos netos. A ese problema, el especialista del Instituto de Investigaciones Jurídicas arrojó una idea que poca atención tuvo: ¿y si México contara con un esquema en el que las personas con menores ingresos estuvieran exentos de aportar para recibir seguridad social?
De ser así, las personas independientes que ganan menos de un límite dispuesto (podría ser uno o dos salarios mínimos), estarían exentos de hacer aportaciones, pero sí recibirían prestaciones sociales. Un esquema así sería disruptor, ya no solo para independientes que trabajan con aplicaciones, sino para independientes de todo el país.
Lo que está pasando en México
Las propuestas para regular el trabajo de repartidores en México ya hay por decenas. Según la Secretaría de Trabajo presentaría una propuesta que sería discutida en Congreso a partir de septiembre pasado. Mientras ello no ocurre, otras iniciativas están discutiéndose.
También presente en el foro estuvo la diputada Ivonne Cisneros, presidenta de la comisión de seguridad social en la Cámara de Diputados e integrante del grupo parlamentario de Morena. Ahí, la diputada Cisneros dijo que en su comisión se ha aprobado una iniciativa que fija aportaciones para las aplicaciones, basadas en el ingreso promedio por los trabajadores.
Pero sin acompañamiento de la Secretaría del Trabajo, es difícil saber cuál será la propuesta definitiva. Además, considerando que el período actual de sesiones del Congreso termina a finales de noviembre, cada vez se vislumbra que el tema quede zanjado este mismo año. Esa no es una mala idea para quienes defienden que una modificación legislativa de este tamaño debería tener mucho debate (Barbosa, de Coparmex, llegó a sugerir que la reforma ocurra hasta dentro de 12 meses), pero mientras tanto, repartidores organizados siguen estando desprotegidos en México.
Saúl Gómez, portavoz del colectivo de repartidores con más visibilidad en el país, 'Ni Un Repartidor Menos', asistió también al foro y participó como ponente. Gómez habló sobre algunos avances que aplicaciones han hecho para dar mejor atención a repartidores, pero también de muertes de repartidores que quedaron desprotegidos por no contar con un esquema de seguridad social.
Con todo, al término del foro a Gómez se le veía satisfecho. "Escuchar a las plataformas decir 'busquemos acuerdos, construyamos la seguridad social', es algo nuevo, claramente aquí se ve que hay disposición de diálogo", dijo a Xataka México. Sobre el tema de que haya seguridad social sin estatus de empleados, Gómez dijo: "tenemos que conseguir algo. Luego por querer conseguir algo nos vamos a quedar nada. Comenzar construyendo seguridad social va a ser fundamental para empezar con un buen diálogo e ir poco a poco buscando mejores cosas".
Ver 13 comentarios