Con la llegada de las tiendas de aplicaciones los desarrolladores encontraron una nueva forma de generar ingresos, que en un principio significó para el usuario final desembolsar un poco de dinero, pero con el tiempo han surgido otros modelos como el freemium que ha empezado a cambiar los hábitos de consumo.
Así The CIU, en su último boletín de prensa, nos ha mostrado que el mercado mexicano de aplicaciones, a pesar del crecimiento en la adopción de los dispositivos inteligentes, ha mostrado una descenso del 8% en la compra de Apps para estos equipos.
Esto quiere decir, que a pesar de que el número de usuarios de aplicaciones en México ya alcanza los 66.9 millones al segundo trimestre de 2015 solo el 8% de ellos ha adquirido una aplicación de paga.
¿Qué ha ocasionado el descenso?
De acuerdo a The CIU el cambio radica principalmente en que los desarrolladores han optado por presentar cada vez más aplicaciones con un modelo de negocio freemium que les permite incluir publicidad dentro de la aplicación o realizar compras de la misma, ya sea para adquirir un ítem adicional o eliminar los anuncios.
Y para maximizar sus ganancias los desarrolladores han comenzado a experimentar con un esquema de retorno a partir del** uso que se le da a las aplicaciones por minuto, así como por la publicidad desplegada**, sin costo alguno para el usuario final.
Incluso los usuarios finales prefieren una aplicación gratuita y que después se le ofrezca la posibilidad de realizar alguna compra dentro de la aplicación, debido a que ya el 21% de ellos ya realiza algún tipo de compra dentro de una aplicación gratuita. Cambiando completamente el paradigma de cómo se debe comercializar una aplicación móvil.
Lo que podría traducirse que en poco tiempo la cifra de la adopción de aplicaciones de paga continúe a la baja. Debido por la creciente tendencia de implementar un modelo de negocio que permiten al usuario la descarga de manera gratuita, como la modalidad freemium o uso por minuto.
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