Una pareja se conoce en 2020 en Bumble, una aplicación de citas en línea en medio de las restricciones de COVID-19. Sin embargo, aunque ambos habían vivido en la misma ciudad durante cinco años y asistieron incluso a la misma universidad, nunca llegaron a coincidir.
Para saber si antes de empezar a salir habían logrado "encontrarse o estar cerca" uno del otro en los mismos espacios Channon Perry, analista de datos, decidió revisar si por azares del destino había cruzado su camino en algún momento de este tiempo con su novio Dan, utilizando los datos del historial de ubicaciones de Google Maps que se recopilan con datos GPS en segundo plano.
El resultado fue que en esos cinco años la pareja tuvo 41 veces la oportunidad de conocerse, y curiosamente el momento en que más cerca estuvo uno del otro fue justo una semana antes de que se relacionaran gracias a la app, ambos coincidieron en la misma cafetería donde ella solía tomar el almuerzo.
Así fue como analizaron las ubicaciones
La revisión de los datos por parte de Perry comenzó obteniendo el historial de localizaciones de Google Maps de los dos, que se consigue desde Google Takeout y que arroja una carpeta de archivos JSON, que contienen información con los tiempos y ubicaciones en cada fecha.
Después, se tomó como criterio un rango de 111 metros para definir la zona en la que ambos podrían haberse cruzado, para así tener un punto en común con ambos y al mismo tiempo, una cantidad adecuada de datos para hacer el análisis.
La información se filtró desde inicios de 2015, cuando ambos se mudaron a Ciudad del Cabo y para considerar que ambos habían estado "al mismo tiempo" en la misma zona, no tenían que pasar más de 10 minutos entre que uno u otro pisara el mismo lugar y permitía, por ejemplo, pensar que ambos habían logrado sentarse en el mismo banco con ese lapso de diferencia.
En total se consiguieron 2,729 coordenadas, con puntos prácticamente idénticos entre los dos, entre ellos 33 dentro de la universidad donde ambos estudiaron y algunas más en la cafetería del edificio de ciencias sociales, quedando el número exacto en 41.25 veces.
Sin embargo, a pesar de la cantidad de información obtenida, hubo algunos problemas e inconsistencias, pues en el caso de Perry, ella consiguió datos mucho más precisos que los de Dan, posiblemente derivado de que él no siempre tenía activa su red móvil o la ubicación no estaba activa todo el tiempo.
Afortunadamente para nosotros, Perry detalló cada uno de los pasos realizados, por lo que también podemos hacer el análisis con nuestra pareja o amigos, utilizando los mismos parámetros o estableciendo los nuestros y procesar únicamente la información que a nosotros nos interesa.
Imagen: Tamas Tuzes-Katai en Unsplash
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