La ciencia ficción y el terror han estado ligados desde casi los inicios del cine. En el mundo animado, también podemos disfrutar de producciones de este estilo que nos recuerdan que las historias más tétricas y extrañas también tienen cabida en distintos formatos. Uno de ellos, el anime.
El adolescente Shinichi Izumi, se enfrenta a una peligrosa amenaza para la humanidad: parásitos extraterrestres que invaden cuerpos humanos. Sin embargo, su éxito no dependerá solo de sus habilidades, ya que Migi, un parásito que se apoderó de su mano derecha, se transformará en su valioso compañero en esta lucha. Esto es Parasyte: The maxim.
Lanzada entre 1988 y 1995, la obra original de Hitoshi Iwaaki llegó a poner de facto la interrogante ¿quién es el mayor adversario del ser humano, si este se autodenomina en la cima de la cadena alimenticia? En este sentido, la llegada de estas criaturas alienígenas pone sobre la mesa el tema de preservación de la raza humana ante la amenaza de un nuevo orden mundial.
A través de los 24 episodios adaptados por Studio Madhouse, se presentan a los parásitos como los principales enemigos de la humanidad pero poco a poco se invita a la reflexión sobre la existencia y el propósito de los seres vivos. Todo esto, rodeado de acción y suspenso creciente.
Entonces, más que querer dar miedo en todo momento, la atmósfera tétrica mezclada con un grotesco body horror ofrece una narrativa que invita a reflexionar sobre los valores morales y éticos que nos definen como seres humanos, al tiempo en que cuestiona la naturaleza de la monstruosidad misma.
Finalmente, entre esta combinación entre violencia, sangre y monstruos, rodeado de filosofía y acción resulta en una disfrutable apuesta que te tendrá al filo del asiento en todo momento.
Si gustas adentrarte al mundo de Shinichi y Migi, puedes encontrar Parasyte: The maxim con tu suscripción a Netflix o Crunchyroll.
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