Los portátiles con Intel Core de 11 ª generación ya están entre nosotros, y he tenido la oportunidad de probar por unas semanas uno de estos modelos. En concreto fue el Spectre x360 13 de HP el que me ha permitido verificar si aquella promesa de Intel sobre la plataforma Evo y los gráficos Iris Xe era real.
Especificaciones técnicas, un vistazo a Tiger Lake
El año pasado Intel dio uno de los saltos más importantes con Tiger Lake. Esta arquitectura, que es en la que se basa la 11ª generación de procesadores Core que hemos probado, cuenta con los nuevos núcleos Willow Cove que pese a seguir siendo de 10nm, tiene algunas mejoras en el proceso de fabricación prometiendo un rendimiento 20% mayor según en fabricante.
Pero más allá de los núcleos, están los gráficos Iris Xe, que me parecen ser la verdadera revolución en esta generación. Los datos de Intel prometen que esta GPU integrada ofrece hasta dos veces más fps en juegos en comparación con otras soluciones similares.
El HP Spectre x360 cuenta con uno de los chips más potentes del catálogo “mobile” de esta generación: el Intel Core i7-1165G7. Es un chip de un TPD máximo de 28W, su litografía es de 10nm SuperFin, tiene cuatro núcleos, ocho hilos, una frecuencia base de 2.8 GHz y una frecuencia máxima de 4.70 GHz. Aquí el resto de especificaciones:
Trabajando y jugando con los chips de 11a gen de Intel
Del lado de productividad, no tengo ninguna queja del hardware. Para alguien que se enfoque en tareas básicas como Office, navegación web o incluso algo de edición de imágenes y video, un chip como el Core i7 de 11ª generación es más que suficiente. Incluso en un escenario un poco más exagerado, con toda la suite de Office abierta, 30 pestañas de Chrome (con una de ellas reproduciendo un video de YouTube en 4K a 60fps) y Spotify con música de fondo, el rendimiento no se vio comprometido.
Me ha sorprendido a velocidad de encendido: literalmente tardó 10 segundos desde que presioné el botón de encendido hasta que me mostró la pantalla de inicio de Windows 10. Para apagarla por completo, tan solo necesitamos 7 segundos, o poco más.
Si gustan tener más referencias del procesador dejo los resultados de algunos benchmarks:
- Geekbench 5: 1560 puntos - Single Core / 4798 puntos - Multi-Core
- PCMark 10: 4041 puntos
- Cinebench: 3708 puntos - Multi Core
- GFXBench: 3538 frames en Aztec Ruins OpenGL (High Tier)
Además del uso en el día a día, que tenía que ser bueno, me interesaba saber qué tal rendían para gaming esos prometedores nuevos gráficos integrados Intel Xe. De entrada les aseguro que su rendimiento no es similar al que se tiene con una GPU discreta, pero la nueva apuesta de Intel llega como una alternativa para quien esté buscando disfrutar de juegos de manera ocasional.
Es obvio que juegos con baja carga gráfica se ejecutan sin ningún problema, principalmente del ambiente indie y sin gráficos exigentes. Por ejemplo, 'Cuphead' puede correr a muy respetables fps y sin caídas de rendimiento.
Me atreví a instalar 'The Witcher 3: Wild Hunt' y con los gráficos al mínimo y en una resolución ligeramente superior a 720p el juego se ejecuta a más de 40 fps, cifra que baja un poco cuando estamos en una zona del mapa con muchos elementos y NPC’s. Intenté también ejecutar 'Destiny 2', un titulo que, al menos en mi experiencia, tiene una muy buena optimización. Igualmente con gráficos al mínimo y una resolución de 720p, el juego se ejecuta a más de 30fps.
En conclusión, estos gráficos Intel Xe están lejos de suplantar a una GPU integrada, pero son una buena opción para quienes no tengan problemas con sacrificar calidad para ejecutar un juegos a poco más de 30fps.
La batería es otro de los aspectos que van directamente vinculados al hardware de Intel. Con un brillo al 50% y el modo ahorro de batería activado, la autonomía supera sin problemas las 10 horas, cifra que puede ser mayor o menor dependiendo de las tareas que estemos ejecutando. La carga se hace por medio de cualquiera de sus puertos USB-C.
La Spectre x360 13 como laptop
La Spectre x360 13 como laptop, cumple con su cometido. Me gusta el tamaño de su pantalla: 13.3 pulgadas, y su relación de aspecto 16:9, principalmente para consumir contenido. El panel es táctil, y tiene una resolución de 1080p. En general la pantalla es buena, no tiene una calibración sorprendente, pero mantiene buena reproducción de color y, sobre todo, buenos ángulos de visión.
El teclado es retroiluminado, de tamaño completo y con algunas teclas adicionales en el lado derecho. Mientras que el trackpad con un formato “alargado” tiene buena respuesta, pero me hubiera gustado que estuviera ligeramente más amplio. Tengo que confesar una vez más que, de momento, no he podido probar ninguna PC con Windows con un trackpad tan bueno como el de las Macbook.
El apartado de puertos, si bien no es tan amplio, ofrece lo justo y necesario: dos puertos USB-C, un puerto USB-A, jack para audífonos y una ranura para tarjetas microSD. Justo a un lado de dicha ranura tenemos un pequeño interruptor que desconecta la cámara. Punto para la privacidad.
El diseño general es un poco lo que hemos visto en versiones anteriores de la laptop: cortes en algunas partes para darle un aspecto mucho más premium: además tiene estos cortes en las esquinas superiores donde encontramos el botón de encendido y uno de los puertos USB-C. Por cierto, las bisagras permiten que la pantalla gire 360 grados para usarla en “modo tablet”, agradezco la opción pero sigo sin sentir cómodo usar un dispositivo de estas dimensiones como tablet.
La opinión de Xataka México
La 11ª generación de chips Intel trae propuestas interesantes. Promete y da un rendimiento más que adecuado para las tareas del día a día, optimiza de forma eficiente la batería y, junto al demás hardware, permite que prácticamente en 10 segundos tengamos lista la laptop para trabajar.
Aunque la mayor promesa estaba en los gráficos. Los Intel Xe vienen como una mejora importante si los comparamos con la versión anterior, pero aún están lejos de ofrecer lo que conseguimos con un GPU discreta de gama baja. Sé también que la exigencia puede ser algo injusta, más considerando que Intel está metiendo este hardware en equipos sumamente delgados y con un TDP que parte de los 12W.
Intel ha lanzado de forma oficial las laptops con chips de 11ª generación en México, y no solo eso, algunos de sus socios han empezado a vender equipos bajo la plataforma Evo, que a reserva de tener ligeras diferencias en el hardware, pretenden ofrecer un rendimiento similar a esta HP Spectre x360 13.
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