El Motorola One Action ya está entre nosotros. La nueva adición en la línea One viene con un nuevo apellido, el cual nos introduce a su característica estrella: una "cámara de acción" (o Action Cam) capaz de grabar video con una óptica gran angular de formato horizontal aún cuando tomemos el teléfono de forma vertical.
He tenido oportunidad de probar el smartphone días antes de su revelación, así que ya tengo una conclusión un tanto prematura (y algunos resultados) sobre cómo compite en el tan agresivo mercado de la gama media-alta, con esa funcionalidad extra con la que pretende diferenciarse.
Action Cam, un gran angular diferente a los demás
Hoy romperé las reglas para iniciar hablando de la que supone ser la característica estrella de este Motorola One Action: su cámara gran angular.
En el arreglo de tres sensores tenemos, de arriba para abajo, un sensor gran angular con óptica de 117 grados, apertura f/2.2 y 16 megapixeles de resolución que hace uso de la tecnología "Quad Pixel" (el nombre marketineano que le pone Motorola al pixel binning) para unir cuatro pixeles en uno.
En la hoja de especificaciones pareciera un sensor normal, pero no lo es. Tiene la particularidad de, en vez de estar acomodado de forma tradicional, está girado 90 grados. Dicha posición es la que nos permite grabar video en formato horizontal sosteniendo el smartphone de manera vertical.
Justo a un lado del botón 'Rec' vemos el botón para activar la Action Cam. Así se vería la interfaz de la grabación horizontal sosteniendo el teléfono en vertical.
Algunos apuntes:
- Esta Action Cam (es decir, el sensor gran angular) es exclusivo para grabar video. No podemos tomar fotos con él de forma tradicional. Solo podremos "tomar fotos" haciendo capturas del video que estemos grabando.
- La resolución máxima de grabación es 1080p. Pero puede ser a 30 fps o a 60 fps. Además, también tiene un modo 21:9, por si queremos grabar video que al consumirse en el mismo smartphone se eliminen las famosas franjas negras.
- Para acceder a esta Action Cam debemos hacer la selección de forma manual. Al pasar al modo video la interfaz de la cámara ahora muestra un icono para activar dicho modo.
- Tenemos estabilización de imagen, pero es digital.
No negaré que la solución es inteligente. Es mil veces más cómodo grabar un video sosteniendo el teléfono en vertical que en horizontal. Además, no es solo el giro de un sensor tradicional, sino de uno con óptica gran angular que captura una mayor cantidad de información de la escena.
Hablando de la calidad. Hice un par de pruebas y bajo condiciones de buena luz y los resultados son aceptables. Buena cantidad de detalle y un buen rango dinámico. Pero cuando la escena se complica, con sombras y luces, tiende a sobresaturar algunas zonas. Las fotos que se capturan tiene prácticamente la misma calidad que la grabación de video.
El estabilizador de imagen digital funciona bien cuando los movimientos son constantes, pero cuando hacemos movimientos mucho más bruscos, se nota la falta de estabilización óptica, la cual pudo haber sido un gran añadido para el concepto de la Action Cam.
También podemos grabar video en formato horizontal, de forma tradicional, pero esto se grabará con la cámara de 12 megapixeles, con lo cual perderemos la óptica gran angular.
Los resultados de la cámara principal en fotografía son muy similares a los que encontramos en el Motorola One Vision. Cuando las condiciones son ideales podemos obtener colores cercanos a los de la realidad, pero sin tanto detalle como su hermano mayor.
De hecho creo que se nota bastante la inclusión de ese sensor de 12 megapixeles en comparación con el de 48 megapixeles de su hermano. Además de que hay un mayor ruido en algunas partes de las fotos.
El rango dinámico tampoco es el mejor del mercado, pero el HDR ayuda en escenas complicadas. Por las pruebas que hice recomendaría siempre dejar activado el HDR, tarda un poco más procesar la foto, pero los resultados son notablemente mejores.
Como datos adicionales:
- No incluye el modo noche que teníamos en el Motorola One Vision, pero sí los modos 'Recorte', 'Color directo' y 'Cinematografía'
- Incluye reconocimiento de escenas, que puede activar modos específicos dependiendo del objeto que estemos fotografiando. En mis pruebas activó el modo alimentos cuando quise fotografíar unas manzanas, al usarlo lo único que noté es que saturó los colores.
Así luce el reconocimiento de escenas. Aparece en la parte inferior de la foto una notificación con el nombre de la escenas y un switch con el que podemos activar los ajustes de color y balance de blancos sugeridos para ella. Podremos activarlo o desactivarlo a nuestro gusto.
- El tercer sensor es uno encargado de capturar información de profundidad, para el famoso modo retrato. Los resultados se quedan dentro de la media. El sujeto debe estar bien diferenciado del fondo para que se realice un buen recorte y para que parezca más natural el desenfoque debemos poner el nivel de blur en niveles bajos.
Modo retrato.
Una vez más, plástico que parece cristal
Las imágenes de prensa lo dejaron en claro: su diseño es idéntico al del Motorola One Vision. Y una vez que pasó por mi manos, confirmo ese dato. De hecho si ponemos este Motorola One Action lado a lado con su hermano, será bastante difícil distinguir sus diferencias.
Tenemos la misma pantalla con formato 21:9, el agujero que alberga la cámara frontal en la esquina superior izquierda, la misma posición de botones, bandeja para SIM, auricular para llamadas y hasta el altavoz.
Las diferencias empiezan a ser notables cuando comparamos sus secciones traseras. Aunque el Motorola One Action mantiene el mismo lenguaje de diseño, con el arreglo fotográfico en vertical, un sensor de huellas en el logo de la compañía y una "textura" escondida bajo su acabado, el material de fabricación acá es plástico.
Eso sí, no es un plástico común. Tiene ese clásico acabado que Motorola ha introducido en otros de sus smartphones, para sentirse y verse como cristal. El tacto es agradable, aunque comparándolo lado a lado con su hermano es inevitable no notar las diferencias.
El regreso de la pantalla 21:9
Las dimensiones del smartphone se mantiene casi intactas. Con esa idea de ser más alto que ancho para tener una mayor comodidad en la mano. Y sí, el formato 21:9 lo hace más cómodo, por ejemplo, para escribir con una sola mano (se puede llegar al extremo derecho/izquierdo con muchísima facilidad), pero sigo teniendo complicaciones para interactuar con algunas apps que tienen elementos en la parte superior.
La pantalla tiene una resolución de 1080 x 2520, con una aceptable densidad de 423 pixeles por pulgada. Más que suficiente para leer texto o consumir contenido. Lo curioso es que, pese a no tener diferencias en el papel respecto al One Vision, el panel tiene una calibración diferente de color y un menor contraste.
El brillo es bueno, pero ligeramente menor al de su hermano. Además la temperatura de color por defecto es fría, mostrando los colores blancos con un tono azulado. No es algo que me quite el sueño, pero se nota comparándolo con su hermano, con quien comparte prácticamente toda tecnología de pantalla.
Y Motorola vuelve a hacer equipo con Samsung
El chip que proporciona la potencia es el ya conocido Exynos 9609, con ocho núcleos a 2.2 GHz, una GPU Mali-G72 MP3 y 4GB de memoria RAM. Este hardware junto con Android en su versión stock y con una mínima personalización, ofrecen un rendimiento sólido. La mayoría de apps se mueven con soltura, y la apertura y multitarea funcionan sin problemas.
Aquí nos queda pendiente probar más a fondo con juegos de gran demanda gráfica, pero su puntaje de AnTuTu (que se queda en los 145,876) nos da una referencia de cómo se comportará. Como lo dijimos hace unos meses, el Exynos 9609 es comparable con el Snapdragon 660 en torno a rendimiento.
Por último: la batería es de 3,500 mAh y se carga por medio de USB-C. Y sí, hay carga rápida, pero en esta ocasión solo de 10W, es decir, más lenta que su hermano mayor. Del rendimiento de la batería no me atreveré a dar conclusiones, pero cuando haya probado lo suficiente, actualizaré este artículo con cifras más concretas de autonomía.
Del almacenamiento no pondré ninguna queja. Se queda con 128GB y con la posibilidad de usar una microSD de hasta 512GB. Más que suficiente.
Es un Android One
Estas son todas las apps que incluye preinstaladas.
Android One es uno de los grandes añadidos a este Motorola One Action, y no solo por el tema de actualizaciones, Android Q y Android R cuando se lancen respectivamente más los 3 años de actualizaciones de seguridad, sino por venir prácticamente sin bloatware.
Lo malo es que seguimos teniendo una barra de notificaciones enorme en la parte superior. Esto debido a que la barra de notificaciones ocupa todo lo ancho del "agujero" de la cámara frontal para que la interfaz de las apps no se corte. Algo con lo que debemos vivir.
¿Notan ese espacio en blanco en la parte superior? Pues es parte de la barra notificaciones.
La opinión de Xataka México
Con este Motorola One Action la empresa vuelve a dejar en claro que está usando su línea de smartphones One para experimentar. Vimos el año pasado como se atrevía con un diseño sumamente arriesgado, hace unos meses con una pantalla con relación de aspecto casi único y ahora con una cámara que pretende hacer más cómoda la grabación de video.
Todo complementado con un hardware competente, una pantalla medianamente sobresaliente y un precio, quizá no rompedor, pero sí competitivo. Puedo atreverme a decir que este smartphone es una apuesta casi única en el mercado de la gama media-alta, con una dirección clara hacia quienes consideran la grabación de video como una prioridad.
Lo malo es que esos mismos usuarios que priorizan el video seguro tendrán exigencias más allá de hacer cómodo el proceso de grabación. Como el tener un estabilizador de imagen óptico o un sensor de mayor resolución para capturar mucha más información.
Mi conclusión tras haber probado el Motorola One Action es: es un smartphone sólido como conjunto, pero una apuesta arriesgada que podría no satisfacer al nicho de mercado que busca atacar.
El Motorola One Action se podrá comprar a partir de hoy en todos los canales de venta de Motorola en México. Su precio es de 7,999 pesos y se venderá en tres colores blanco luminoso, gris vintage y Aqua, este último se empezará a vender dentro de unas semanas.
Aquí una imagen de cómo lucen todas las versiones:
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