Moto X Play, análisis

Motorola siempre ha sido uno de los fabricantes clave en el mundo Android. En los inicios del sistema operativo la familia Droid, la línea RAZR, e incluso el Motorola Dext fueron algunos de sus más importantes lanzamientos. Desgraciadamente dicho catálogo no pudo implicarle un éxito a la compañía en todos lo mercados, así que después de ser adquirida por Google decidieron realizar movimientos extraños en algunos de éstos.

Dichos movimientos, principalmente en países europeos, posteriormente se acompañaron de un lanzamiento —en los mercados donde seguían operando con normalidad— con el que iniciaban una nueva etapa. El Moto X inauguró una era donde ofrecer una excelente experiencia de usuario era el objetivo principal de la compañía.

Aquel terminal vio la luz en 2013; un año mas tarde vimos su segunda generación; y ahora en 2015 estamos ante su tercera versión. Pero en este año Motorola ha decidido poner en el mercado dos Moto X: uno con especificaciones técnicas respetables acompañadas de un precio competitivo, y otro con el que lucharán en la gama alta Android.

En Xataka México hemos podido probar por unos días el primero de ellos; el más pequeño; el gama media premium; el más interesante para nuestro mercado. Bienvenidos a nuestro análisis a fondo del Moto X Play.

Especificaciones técnicas

Antes de entrar al plato fuerte dejamos a modo de entremés la completa lista de especificaciones técnicas del Moto X Play, así lo empezaremos a conocer mejor:

	Motorola Moto X Play
Dimensiones físicas	148 x 75 x 10.9 milímetros
Peso	169 gramos
Pantalla	5.5 pulgadas con Corning Gorilla Glass 3
Resolución	1920 x 1080 pixeles (400ppi)
Procesador	Snapdragon 615 octa-core a 1.7 GHz
RAM	2 GB
Memoria	16 GB / 32 GB, ampliable vía microSD hasta 128GB
Batería	3630 mAh (no extraíble)
Cámaras	21 megapixeles + frontal 5 megapixeles
Sistema Operativo	Android 5.1.1 Lollipop
Conectividad	WiFi 802.11 b/g/n, 4G LTE, Bluetooth 4.0 LE, GPS
Precio	5999 pesos

Diseño

Toda la línea Moto 2015 integra cambios en su diseño, el más notable de todos es en la parte trasera donde la cámara y el flash LED ahora están unidos al logo de la compañía con una pequeña placa, pero el Moto X Play integra algunas modificaciones adicionales con las que se quiere diferenciar aún más de las generaciones anteriores.

La parte delantera mantiene el mismo lenguaje de diseño de la generación 2014: marcos diminutos que permiten incluir un panel de generosa diagonal en un cuerpo de contenidas dimensiones, además encontramos ese par de líneas en los extremos —superior e inferior—, y los respectivos sensores: tanto de luz ambiental, proximidad, y cámara frontal.

De este apartado hay que mencionar que, al igual que el Moto G 2015, no se integra un sistema de altavoces estéreo, quedándonos sólo con un altavoz en la parte inferior, la parte superior sólo incluye el auricular para llamadas.

Un detalle que inevitablemente notarán si vienen de un Moto X 2014 es que el perímetro del cristal frontal integra una curvatura mucho más discreta, ahora luce más como un pequeño biselado que como un curva que pretende unir el frontal con el marco.

La parte trasera mantiene la característica curvatura de la línea Moto, permitiendo que el móvil mantenga su ergonomía y a la vez un buen agarre. Un cambio en dicha sección es que el marco ahora pasa a utilizar parte de ella, disminuyendo así el área de la tapa, que por cierto es intercambiable.

El material con el que la tapa ha sido construida es plástico, pero ahora con un acabado gomoso que, sumado al patrón que le han incorporado, ayuda a incrementar el agarre del móvil siendo mucho menos resbaladizo.

La distribución de botones sigue siendo la misma, el de encendido —que integra una pequeña textura— y los de control de volumen están en el lateral derecho. Éstos tienen una buena construcción, pero desgraciadamente no están totalmente fijos al cuerpo propiciando que bailen en sus ranuras, de hecho al agitar el terminal notaremos el pequeño sonido que producen.

Si repasamos las dimensiones vemos que el tamaño del móvil es totalmente acertado, y más conociendo que su diagonal se eleva hasta las 5.5 pulgadas. El alto y ancho crecen respecto al Moto X 2014, pero se mantienen en cifras que nos permiten manejar el móvil con una sola mano. El grosor igual aumenta a los 10.9 milímetros, pero recordemos que ganamos una batería de mayor capacidad.

El peso llega hasta los 169 gramos, una cifra elevada si lo comparamos con su competencia, pero al igual que su grosor es un tanto justificable por la interesante capacidad de su batería.

En general el diseño es robusto y con buen tacto. Motorola ha sabido ofrecer cuerpos sólidos en modelos donde no integran materiales premium, como el cristal o el metal. Además hay que reconocer su trabajo al aprovechar el frontal, reduciendo los marcos y apostando por pantallas de un tamaños que hace años eran exclusivos para los phablets.

Aquí también cabe mencionar que el móvil se venderá por medio de Moto Maker, así que si buscan una personalización profunda podrán optar por comprarlo en esta plataforma, pudiendo elegir entre color de frontal, el de la tapa trasera, y los detalles. En hardware tendrán opción de elegir entre 16 o 32 GB.

Pantalla

Desde la primer generación de Moto X, Motorola había apostado por paneles AMOLED. Pero para esta ocasión se han decidido por un panel LCD de 5.5 pulgadas y resolución Full HD.

Con tal resolución, y tamaño de diagonal, la densidad se queda en 400 pixeles por pulgada, cifra totalmente aceptable y adecuada para sus dimensiones. Los elementos de la interfaz se ven con muy buena nitidez, así que es difícil apreciar diferencias, por ejemplo, con un panel 2K —aunque por supuesto que las hay.

En lo que respecta a su rendimiento estamos ante uno adecuado. Muy buenos ángulos de visión, reproducción de color más que aceptable, así como respetables negros y blancos. A nuestro gusto la temperatura de color es fría, ya que en ocasiones los blancos se muestran un poco azules.

Del brillo máximo podemos decir que es adecuado para mirar la pantalla bajo la luz del sol; por otro lado el brillo mínimo será óptimo para aquellos que usualmente utilizan el móvil en plena obscuridad. Para sacarle el mayor provecho habrá que desactivar el control automático cuando estemos bajo la luz del sol —para subir el nivel al máximo—; pero activarlo cuando estemos a obscuras —para que automáticamente se baje al nivel mínimo.

Una queja, que igualmente le mencionamos cuando revisamos el Moto G 2015, es que por integrar un panel LCD se le saca menos provecho a la famosa Pantalla Moto ya que ésta, en vez de sólo encender los pixeles necesarios para mostrar las notificaciones, enciende toda la pantalla, perdiendo parte de su propósito: ahorrar batería.

Como vemos en las fotografías, la pantalla es altamente reflectante. El problema se trata de solucionar con los respetables niveles de brillo, sin embargo, el cristal es el que no ayuda. Eso sí, se incluye una protección Corning Gorilla Glass de tercera generación que promete resistir a las ralladuras.

Hemos contactado a Motorola para que nos contará qué tipo de panel se ha utilizado y nos han confirmado que es un LCD IPS. Además nos dicen que la aplicación Pantalla Moto tuvo un ajuste para que su consumo energético sea mínimo, aunque es un dato que no hemos podido corroborar..

Rendimiento

Motorola se ha decidido por una interesante combinación de chip, RAM, y almacenamiento, para este móvil, todo con el fin de ofrecer la clásica experiencia de usuario de la línea Moto a un precio realmente competitivo.

El chip elegido para el Moto X Play es el Snapdragon 615, el cual cuenta con una arquitectura de 64 bits en sus ocho núcleos, donde cuatro de ellos tienen una velocidad de reloj de 1.7 GHz y otros cuatro de 1.0 GHz. La memoria RAM es de 2GB, y la GPU una Adreno 405.

El sistema operativo en general se mueve con soltura, pero hemos notado que en ocasiones puntuales el móvil se atraganta, por ejemplo, en el cambio entre aplicaciones. Por supuesto, no podemos exigir el mismo resultado que con un gama alta, pero al menos extrañamos esa consistencia de rendimiento que ha caracterizado a los terminales Motorola.

Para quien esté esperando resultados de benchmarks aquí dejamos un gráfico con los obtenidos en Antutu —agregamos los resultados de otros móviles para hacer una comparación y tener referencias:

En los primeros días de uso notamos un ligero calentamiento, aunque después de hacer diversas pruebas vimos que éste se suscitaba cuando estábamos en habitaciones donde la señal móvil era débil, algo común en smartphones de última generación.

Del almacenamiento no hay ningún pero. La versión base es de 16 GB —con poco más de 10 GB disponibles para el usuario— aunque lo podremos ampliar sin problemas con tarjetas microSD. Un tema al que tenemos que poner atención es que estas tarjetas se insertan en la misma sección donde están los nanoSIM, no es algo que afecte la experiencia de usuario, pero sí habrá que poner atención al extraer esa bandeja.

En general, el Moto X Play no carece de potencia. Si bien su chipset no es uno enfocado a la gama alta, éste cumple bien con ofrecer una excelente experiencia de usuario. Por supuesto, la optimización que hace Motorola vía software es una de las razones por las que esto es posible.

Batería, audio y conectividad

La autonomía es un aspecto cada vez más crucial en los móviles. El Moto X Play integra una batería con 3630 mAh de capacidad, cifra elevada si la comparamos con su competencia, aunque no tan alta como la que encontramos en el Moto Maxx.

Aquí nuestra prueba fue la misma que utilizamos con otros móviles, cargar por completo el smartphone y utilizarlo de forma común, con cambio entre WiFi y datos móviles, reproducción de video, llamadas, redes sociales, y fotografía. Bajo estas condiciones el terminal pudo superar una jornada normal de trabajo; empezamos la prueba a las 00:00 horas y la terminamos a las 11:00 AM del siguiente día.

Del audio no hay mucho que mencionar, sólo que no se integró un sistema estéreo y ahora cuenta con un sólo altavoz en la parte inferior. No estamos ante el mejor sistema de sonido, pero cumple perfecto tanto en calidad como en potencia. Sobre este tema le dejamos un mensaje a Motorola:

A todos nos gustaba el sistema de sonido estéreo de los modelos 2014, así que el que lo elimines de tu generación 2015 lo consideramos un paso atrás enorme —aunque tendrás tus razones para hacerlo.

En el apartado de conectividad nos quedamos con uno completo, donde lo que más luce es la posibilidad de conectarse a redes LTE. Además, la unidad que analizamos es la que incorpora capacidad dualSIM, cubriendo así una necesidad que, según Motorola, ha estado presente en el mercado mexicano.

Este es el segundo terminal de la compañía con capacidad dualSIM en el país, así que es lógico que dicha característica sea integrada como básica en los próximos dispositivos de la compañía. Claro, sólo para unidades que no se venden con operadoras, es decir, las de canales retail.

Cámara

Toda la nueva generación 2015 de móviles Motorola tiene especial atención en el apartado fotográfico. Las dos generaciones anteriores, desgraciadamente, no han podido relucir a la hora de capturar fotografías, sin embargo, la empresa pretende que en durante este año sea diferente.

Para el Moto X Play decidieron incorporar un sensor de 21 megapixeles, con apertura f/2.0, flash dual de LED, y modo HDR, pero ¿cuál es su rendimiento?.

En las pruebas que hicimos notamos una gran mejora respecto al Moto X 2014, tanto en la nitidez de las capturas —gracias al sensor de gran resolución— como en la captura general de colores. Esto para condiciones donde la luz ambiental es suficiente para iluminar la escena.

Cuando hace falta iluminación, o cuando estamos en interiores, las capturas llegan a adquirir un poco de ruido. No obstante, las fotos que hagamos con baja iluminación tienen resultados interesantes, de hecho superiores a los que obtuvimos con las generaciones anteriores de Moto X, tanto 2013 y 2014.

La aplicación “Cámara” es la misma que tenemos en toda la línea Motorola, con ajustes muy básicos e interfaz minimalista. Eso sí, podemos activar el enfoque y exposición táctil para así tener más control de las escenas, pero dicha función aún está lejos de un control manual que otras aplicaciones fotográficas ofrecen.

No obstante, hay que reconocer la optimización que se hizo del software para que las fotos se capturen de forma casi inmediata.

La cámara secundaría, es de cinco megapixeles y cumple con su cometido de ser utilizada para selfies; es un sensor básico —de buena resolución— con buen angular, desgraciadamente no tan interesante como dedicarle un apartado completo.

La grabación de video se queda en 1080p de resolución a 30 cuadros por segundo, y a ésta se suma un modo de cámara lenta en calidad 540p. Como viene siendo habitual, bajo buenas condiciones de luz los videos se capturan con calidad decente, pero cuando carece la iluminación —o cuando estamos en interiores— el ruido hace acto de presencia.

Software

Afortunadamente no podemos ampliarnos en hablar del software del Moto X Play, todo por que Motorola ha decidido —otra vez— instalar una versión de Android stock en el móvil. Al igual que toda la línea 2015, las únicas aplicaciones propietarias, que ofrecen funcionalidades adicionales a las básicas son: el asistente de migración y Moto.

Aquí el comentario más importante a realizar es que Motorola ha decidido no implementar todas las funciones que ha estado incorporando en sus terminales. En concreto hablamos del gesto que nos permite encender la linterna, la función se estrenó con Android 5.1 en toda la línea Moto, pero para este modelo la omitieron.

Ya tomando el camino de las carencias del terminal es inevitable no mencionar la que hasta hace poco salió a la luz: el Moto X Play no cuenta con giroscopio, un sensor necesario para disfrutar de ciertas aplicaciones. Esta carencia será más notable para aquellos que gusten visualizar contenidos en realidad aumentada, pues el sensor es imprescindible para calcular nuestra posición espacial.

En concreto la versión stock de Android instalada es la 5.1.1, una de las últimas que ha puesto Google en el mercado. Ahora mismo nos interesa saber cuándo será que Android Marshmallow llegue al dispositivo, esperamos que, como el año pasado, la línea Moto X 2015 sea la primera en actualizarse a tal SO.

La opinión de Xataka México

Motorola ha decidido enfocarse, una vez más, a un nicho de mercado específico con este Moto X Play, aquel que busque cierta personalización del móvil, una pantalla con calidad notable, una cámara con buen rendimiento, pero un hardware que no necesariamente está pensado para tareas exigentes.

El acabado del móvil es sumamente sólido, y sigue con las líneas que la compañía ha mantenido desde el primer Moto X. El frontal está muy bien aprovechado, y los materiales —aunque están lejos de la etiqueta premium— le dan un aspecto atractivo.

La pantalla y la cámara destacan. Ambos apartados son resultado de una gran decisión de Motorola: una de ellas es la de dejar a un lado los paneles AMOLED y la otra es darle el mayor protagonismo al apartado fotográfico.

En su hardware seguramente vamos a tener opiniones divididas, por que muchos podrían decir que es injusto pedirle un excelente rendimiento a dicho conjunto, pero esas inconsistencias de fluidez, al menos en nuestro caso (habiéndo probado la mayoría de modelos Moto), las notamos con frecuencia.

Pero de todos los apartados, el que más destaca es el de autonomía. El smartphone puede sobrevivir por más de una jornada laboral sin ningún problema, y de hecho si gestionamos bien el consumo podríamos estirarla hasta los dos días.

El Moto X Play es, inevitablemente, un gama media premium. Algunas de las especificaciones técnicas no lo dejan sobrepasar la gama media, pero algunas otras (principalmente la pantalla, la cámara, y batería) son lo que esperamos en un terminal tope de gama. Por esa razón consideramos su lanzamiento una apuesta arriesgada de Motorola.

Su precio es su mayor atractivo, ya que por 5999 pesos difícilmente podremos encontrar un móvil con las mismas capacidades. Aunque obvio, eso no será imposible, por ejemplo tenemos a la firma Alcatel que hace poco trajo una versión de su Idol 3 con características similares a las de este Moto X Play.

Precio y disponibilidad

El Moto X Play ya está disponible para su compra en México. La plataforma Moto Maker es la primera vía por la que se venderá, después llegará a operadoras, y canales retail, ésta última comercializará una versión dualSIM con 16GB de almacenamiento (versión analizada).

Los precio son:

• Moto X Play de 16GB por 5999 pesos.
• Moto X Play de 32GB por 6498 pesos.