iPhone XS Max, análisis: más grande, más rápido y —mucho— más caro

Después de que Apple se saliera de su clásico ciclo de actualización del iPhone el año pasado, pretende retomarlo a partir de este 2018. Este año regresan las versiones "S", pero en esta ocasión estamos ante un tick bastante peculiar, el del teléfono más importante de la última década para la compañía: el iPhone X.

El iPhone X vino a marcar pauta para el mercado de los smartphones en general. No fue el primero en muchas de sus novedades tecnológicas, pero su inevitable influencia está haciendo que sistemas de reconocimiento facial, navegación por gestos y pantallas con pequeñísimos marcos (y notch) estén inundando todas las gamas.

Ahora un año después Apple se está comprometiendo a mejorarlo, con un procesador más potente, muchísima fotografía computacional y una pantalla más grande. Los iPhone XS ya están en México, y he tenido oportunidad de pasar poco más de una semana con uno de estos modelos. El hermano mayor. El más grande. El iPhone XS Max.

Así que sin más, bienvenidos al análisis del smartphone más costoso disponible en México.

Especificaciones técnicas

La presentación de estos iPhone XS ha sido relativamente reciente, así que seguro y muchos están enterados de la mayoría de sus especificaciones, pero no quiero perder la oportunidad de resumirlas en una tabla para quienes tengan dudas sobre alguna característica:

	iPhone XS Max
DIMENSIONES FÍSICAS	157.5 x 77.4 x 7.7 milímetros
PESO	208 gramos
PANTALLA	OLED 6.5 pulgadas
RESOLUCIÓN	1242 x 2688 pixeles
PROCESADOR	Apple A12 Bionic six-core
RAM	4GB
ALMACENAMIENTO	64GB/256GB/512GB
BATERÍA	3174 mAh
CÁMARAS	12 MPX (28mm con OIS) + 12MPX (52mm con OIS), frontal 7MPX
SISTEMA OPERATIVO	iOS 12
CONECTIVIDAD	WiFi 802.11 b/g/n/ac, 4G LTE, Bluetooth 5 LE, GPS, NFC y Lightning
PRECIO	26,999 pesos/30,699 pesos/35,499 pesos

El diseño del iPhone X vino para quedarse

El iPhone X vino a cambiar el diseño de los smartphones de Apple para siempre, apostaba por el acero inoxidable y cristal para su fabricación, disminuía los marcos de su pantalla al mínimo, olvidaba el botón de inicio y introducía al notch. La nueva pauta para el iPhone está marcada, y este año toca mejorarla.

El iPhone XS Max calca perfectamente el diseño de su antecesor, mismos materiales y misma posición de componentes, solo que lo hacen más grande y más resistente. Apple asegura que el vidrio usado es el "más resistente jamás usado en un smartphone", un declaración que considero tramposa, pues dejar caer el teléfono siempre será un cara o cruz: se rompe o no.

Por eso mismo no pude comprobar su resistencia, pero sí confirmo que proporciona una muy buena sensación al tacto, la cual se complementa muy bien con la que transmite ese marco fabricado en acero.

El color de nuestra unidad es el oro, que se suma al plata y gris espacial. Mis impresiones de éste se mantienen idénticas a las del primer día que lo empecé a usar: se ve como un producto realmente premium, incluso apuntando más a una pieza de joyería y no tanto a un producto tecnológico. Algo bueno para unos, pero malo para otros.

La parte trasera mantiene ese clásico minimalismo de años anteriores, el logo de la empresa y el arreglo fotográfico como protagonistas. Éste último además carga con el mismo "problema" (sí, entre comillas) de otros iPhone, sobresale del cuerpo provocando que si usamos el teléfono sobre una mesa tenga un ligero baile. La verdad solo quise poner esto como apunte, ya que no afectó a mi experiencia general.

El marco es el encargado de albergar todos los elementos restantes: un botón de encendido y la bandeja para la SIM en el lateral derecho, un par de botones de volumen en el izquierdo y un switch para el activar el modo silencio, y un altavoz y el puerto lightning en el borde inferior.

Esta versión aumenta de forma considerable su tamaño respecto al iPhone X, en concreto llega hasta los 157.5 milímetros de alto y a los 77.4 milímetros de ancho. Algo que sobre el papel puede sonar mucho, pero es bastante similar al iPhone 8 Plus, solo que ahora gana una pantalla una pulgada más grande.

Aquí una comparativa con otros gama alta disponibles en México, tanto en dimensiones, peso como en aprovechamiento del frontal, en el cual al parecer gana este iPhone XS Max.

	iPhone XS Max	iPhone XS	Samsung Galaxy Note 9	Huawei P20 Pro	LG G7 ThinQ
Alto	157.5 mm	143.6 mm	161.9 mm	155 mm	153.2 mm
Ancho	77.4 mm	70.9 mm	76.4 mm	73.9 mm	71.9 mm
Grosor	7.7 mm	7.7 mm	8.8 mm	7.8 mm	7.9 mm
Peso	280 g	177 g	201 g	180 g	162 g
Pantalla	6.5"	5.8"	6.4"	6.1"	6.1"
% de superficie que es pantalla	84.4%	82.9%	83.4%	82.0%	82.6%

Eso sí, el iPhone XS Max es imposible de manejar con una sola mano, y de hecho pretender lograrlo lo considero peligroso. Es muy probable que el teléfono se resbale de las manos al tratar de hace esos malabares, además el acero y el cristal no son los materiales con mejor agarre del mundo.

Más allá del color y del tamaño, un cambio lo encontramos en su resistencia. Ahora se incorpora una certificación IP68 que, según la nomenclatura CEI 60529, protege totalmente al interior de la entrada de polvo y permite sumergir el dispositivo a un metro de profundidad durante treinta minutos.

Una OLED más grande y más hermosa

Así como Apple mantuvo el diseño del iPhone X, también mantiene el uso del panel OLED, las tecnologías HDR y la calibración en su pantalla. Pero ahora todo ha sido metido en un descomunal tamaño que llega a las 6.5 pulgadas. Según la compañía es "la pantalla más grande en un iPhone".

Mi opinión de la pantalla se mantiene intacta a la que proporcioné hace unos días, es un panel espectacular, tanto en tamaño como en calidad. Colores vibrantes, negros profundos (recordemos que los OLED tienen contraste infinito) y amplios ángulos de visión.

Por supuesto, como se espera en un gama alta, hay compatibilidad con video High-dynamic-range (HDR), en específico con el que cumple el estándar HDR10 y Dolby Vision. Y como en generaciones anteriores, cubre la gama de colores DCI-P3.

El brillo máximo me pareció adecuado para visualizar contenidos en plena luz del sol, mientras que el mínimo es óptimo para ambientes de plena obscuridad. Según cifras oficiales de Apple, el máximo llega a 625 nits, lo cual dentro del estándar de los buques insignia actuales.

La siguiente imagen fue tomada con microscopio y muestra el arreglo de subpixeles del panel. Es un Diamond que se usa en muchas pantallas OLED para minimizar la distorsión de colores.

Igualmente se mantienen las funciones TrueTone y Night Shift en este iPhone XS Max: la primera ajusta la temperatura de color de acuerdo a luz ambiente de donde estemos y la segunda disminuye la luz azul producida por el panel para ayudar a descansar la vista en las noches, la primera funciona de forma automática y la segunda se puede programar por horarios específicos.

La polémica del notch creo que este año ya no tiene ningún sentido, y menos cuando hay un montón de smartphones de todas marcas, sabores y olores que lo integran. Aunque hay un apunte interesante que hacer, los wallpapers predeterminados de los iPhone XS y XS Max esconden la muesca con secciones negras. Apple no se despedirá de esta seña de identidad estética, pero quizá ya no se sienten orgullosos de ella.

Mi opinión sobre el notch es: después de ver como un montón de smartphones lo integraron a lo largo de un año, cualquier modelo (incluído el iPhone) ya roza lo genérico.

Mucha potencia que nos costará identificar

Una de las mejoras más llamativas en esta generación está en su interior, en concreto, en su procesador ahora llamado A12 Bionic, una actualización importante respecto al A11 Bionic que conocimos el año pasado. Algunos apuntes nerds de este chip:

• Es el primer chip fabricado con un proceso de 7nm que llega al mercado. Huawei ya había presentado el Kirin 980 hace algunas semanas, pero habrá que esperar hasta la presentación del Mate 20 para tenerlo en el mercado.
• El ser fabricado con este proceso ahora puede tener 6.9 mil millones de transistores. Un 60% más en comparación con el A11 Bionic.
• El CPU viene en un arreglo de seis núcleos. Dos de ellos enfocados a tareas de alto rendimiento (Vortex) y otros cuatro enfocados en tareas que necesiten mayor eficiencia energética (Tempest).
• El GPU mejora con la suma de un núcleo adicional en comparación con la generación anterior, ahora tiene cuatro.
• Se integra un nuevo 'Neural Engine', una parte del SoC con ocho núcleos responsable del procesamiento de redes neuronales de IA. Según Apple, éste es capaz de realizar hasta 5 billones de operaciones por segundo (5 TeraOPS), 8 veces más que el incluido en el A11 Bionic.

Imagen vía iFixit

Un montón de cifras y números que en mi experiencia se tradujeron a un rendimiento brutal. El iPhone XS Max vuela en cualquier tarea, app o juego. La multitarea también ofrece un buen rendimiento, gracias a la incorporación de 4GB de memoria RAM. Y por cierto, todo el hardware ahora permite tener hasta 512GB de almacenamiento.

Estaba ansioso por ver si había mejora de gráficos respecto a su antecesor, estuve un rato jugando 'Fornite' y noté ligeras diferencias, beneficiando principalmente a la fluidez. Mientras que otros juegos con una carga gráfica más agresiva, como 'Asphalt 9: Legends', también se ejecutan sin problemas. Hace unos días también tuve oportunidad de jugar 'Blades' de Bethesda en uno de estos iPhone XS Max y era tan fluido como lo mostraron en E3 2018.

La mejora está ahí, pero seguro será imperceptible para la mayoría. De hecho a mi me costó notarla aún poniendo lado a lado este modelo con el iPhone X.

Batería más grande y, por fin, más autonomía

Emplear un proceso de 7nm en el A12 Bionic no solo mejora el rendimiento, también el consumo de energía más bajo. Y esto claro que esto lo he visto reflejado en la autonomía del iPhone XS Max.

En mis pruebas el smartphone ha llegado bastante holgado al final del día, con un 25% de batería restante aproximadamente. Dejando la puerta abierta a que, si encendemos el modo "Ahorrar batería", logremos sobrevivir unas cuentas horas durante el día siguiente.

El tema de la autonomía depende mucho del uso que se le dé a los smartphones, pero al menos puedo confirmar que en este modelo no tendremos que pegarnos al cargador a las 6pm porque necesitamos terminar el día.

Pulgar abajo con el sistema de carga. Aquí mantengo mi crítica sobre el cargador incluido. La empresa insiste con ese pequeño cuadro que solo proporciona 5W de potencia, y que hace quedar a este modelo por debajo de la competencia en el tiempo de carga total de su batería.

Apple asegura que el iPhone XS Max puede cargar el 50% en 30 minutos, pero las letras chiquitas dicen que esto se logra con adaptadores de corriente USB-C de 30W o 87W y un cable USB-C a lightning, que por cierto, se venden por separado. Si quieres carga rápida, habrá que pasar por caja y pagar mínimo 1568 pesos.

También se repite la incorporación de carga inalámbrica, que es más rápida comparada con su antecesor y además funciona con menos problemas cuando colocamos el smartphone lejos del centro de la base de carga.

Dos bocinas más potentes y de mejor calidad

No negaré que fue un poco confuso lo que Apple dijo en la keynote sobre los altavoces de este iPhone, la compañía llama a su nuevo sistema "Sonido estéreo más amplio" lo cual se traduce en ofrecer un mejor sonido tanto en potencia como en calidad. Y eso se cumple.

El iPhone XS Max hace uso de micrófonos y un sistema de cancelación de ruido para mejorar el sonido al reproducir cualquier contenido. Tenemos un par de altavoces en la misma posición (uno en el lado inferior y otro donde está el auricular de llamadas) del iPhone X, pero ahora estos suenan mucho más fuerte y con una mejor claridad.

No obstante, aún cuando hay mejora respecto a la generación anterior, la potencia del altavoz se queda algo abajo en comparación con la del LG G7 ThinQ, que para mi con su solución Boombox es referencia en torno a sonido en el mercado de smartphones.

El sonido con audífonos se queda dentro de lo mismo que hemos recibido en años anteriores, no hay jack de 3.5 milímetros así que o tiramos de los Earpods que se incluyen en la caja o de audífonos inalámbricos Bluetooth. La tercera solución, que involucraba el uso del adaptador de jack a ligthning, ya no es opción porque este año no lo incluyeron en la caja.

El mismo FaceID de hace un año

Ya lo había adelantado la compañía hace un año, la identificación por medio de la huella dactilar es cosa del pasado, lo de hoy es usar nuestro rostro como seña de identidad.

Este iPhone XS Max hace uso del sistema de reconocimiento facial FaceID, con el mismo hardware que se incluyó en el iPhone X, esa cámara que han bautizado como TrueDepth.

Mi experiencia con este sistema es bastante similar a la de hace un año, solo que ahora es ligeramente más rápido y más preciso, principalmente en ambientes con difícil iluminación y en ángulos de visualización un poco más abiertos. Pero al igual que con el tema de rendimiento, pocas personas notarán una mejora.

Si queremos mejorar la velocidad general de identificación, recomiendo desactivar la opción "Requerir atención" desde configuración. Esto disminuirá la seguridad del sistema ya que no requerirá que estemos mirando la pantalla para desbloquearse, por ejemplo, alguien podrá colocar el iPhone en nuestro rostro cuando dormimos y éste se desbloqueará.

Con iOS 12 ahora tenemos oportunidad de almacenar una "apariencia adicional", ya sea nuestra o de otra persona. Mi recomendación es que grabemos una situación en la que usualmente a FaceID se le dificulte reconocernos y que la usemos de forma continúa.

Con esta nueva versión de iOS también se están estrenando los Memojis, avatares personalizados que le sacan provecho a los sensores de FaceID para realizar un seguimiento en tiempo real de las expresiones y movimientos de nuestro rostro. Como el año pasado, una muestra del potencial que tiene todo el hardware incorporado el notch, pero en general son más bonitos que útiles.

Cámara: apuntar y disparar

Para nadie es una sorpresa que los días de gloria del iPhone en el mercado de la fotografía móvil han terminado. Afuera hay un montón de fabricantes que están incorporando cámaras con aperturas variables, hasta tres sensores y mucha fotografía computacional. Pero ese año Apple planea recuperar el trono.

Y lo hace tomando ideas prestadas de algunos fabricantes y sacándole el mayor partido a su A12 Bionic, y en específico, a su motor neuronal.

La actualización de hardware fotográfico en este iPhone XS Max es ligera, pero importante. Hay dos cámaras, la telefoto se mantiene intacta tanto en resolución como en apertura y óptica, pero la gran angular mantiene sus 12 megapixeles de resolución pero aumenta el tamaño del sensor hasta las 1/2.55 pulgadas.

Este aumento de tamaño y misma resolución, propicia a que tengamos fotodiodos más grandes y profundos en comparación al iPhone X (1.4μm vs 1.22μm / 3.1µm vs 3.5µm) los cuales en teoría capturarán más luz.

Pero no nos quedamos solo con mejoras físicas, también hay el software. Apple está estrenando algo llamado Smart HDR que no es más que un modo HDR potenciado: se capturan una serie de imágenes con diferentes niveles de exposición (incluso antes de que tomemos la foto se obtiene algo de información de la escena), se hace un análisis y combinación de toda esa información, y se obtiene una sola foto.

Lo interesante es que todo el proceso es relativamente invisible para el usuario, gracias a toda esa potencia de 5 TeraOPS que nos ofrece el motor neuronal del A12 Bionic. De hecho es uno de los mayores usos de esa sección del SoC, según Apple.

Pero bueno ¿qué tal salen las fotos?

En general, excelentes. Noto un buena captura de detalles y un buen rango dinámico gracias a toda esa fotografía computacional implementada. Curioso que contrario a lo que están haciendo otros fabricantes, Apple insista en no saturar tanto los colores y presentarlos lo más realistas posibles.

Si activamos el HDR Smart (que por defecto viene activado), notaremos que los colores se saturan ligeramente, para darle un poco de más vida a las fotos. Aunque esto también ayuda a no quemar tanto algunas partes de las escenas. Aquí una comparativa de algunas fotos con y sin HDR:

En este último ejemplo se puede ver como el Smart HDR salva las nubes. Hace que no se vean quemadas

De noche este iPhone XS Max también pone a Apple a luchar por el trono de la fotografía. Hay una mejora en como muestra la luz de los focos sin obscurecer la escena general. Sigue habiendo ruido, pero menor al que se obtenía con el iPhone X.

Lo que sí me preocupa es la resolución del sensor, si bien hay una mejora en la captura de detalles respecto a su antecesor, comparando sus resultados con un P20 Pro se nota que hay una menor captura de información. Aunque al final, el alto contraste de teléfono de Huawei, hace que se pierdan muchos colores.

El modo retrato también está siendo beneficiado por toda la fotografía computacional implementada por Apple, y de hecho me sigue pareciendo uno de los menos artificiales de todos los smartphones que lo implementan. Aunque sigue habiendo problemas con la detección de contornos y principalmente del pelo, y sigue necesitando de buena iluminación (y distancia) para realizar el efecto.

Una mejora de este modo es la posibilidad de elegir el nivel de desenfoque, o bokeh. Editando una foto del modo retrato podemos elegir entre diferentes niveles de apertura ficticia (de f/1.4 a f/16) para que el fondo salga más, o menos, difuminado. Una característica que, no negaré, ya llevaba un montón de tiempo en otros smartphones.

Agradezco que Apple proporcione un control adicional sobre las fotos retrato, pero las aperturas menores a f/5.0 me parecieron bastante artificiales, empeorando muchísimo las fotos.

Por otro lado, los modos de luz —casi— siguen estando de adorno, ya que para sacarles provecho debemos tener situaciones muy específicas. Por ejemplo, el modo reflector puede ofrecer buenas fotos, pero para usarlo habrá que tener un sujeto con un contorno bien definido.

El modo video también ha recibido una actualización. Ahora tenemos mejoras en la reducción de ruido y en el contraste, pero sobre todo, una mejor estabilización y grabación de sonido estéreo.

Las mejoras en la calidad son patrocinadas gracias por el nuevo rango dinámico ampliado que grabando a 30fps puede capturar dos clips con diferente exposición para mejorar las luces y sombras en el resultado final. Lo bueno es que esta funcionalidad la podemos aprovechar aún grabando a una resolución 4K.

Por otro lado el sonido ahora se grabará en estéreo gracias al uso de los micrófonos incorporados y al sistema de cancelación de ruido que iguala los canales L y R en salida y ancho de banda para ofrecer un sonido más equilibrado.

La cámara cuenta con un clásico estabilizador óptico de imagen, pero según Apple éste se apoya de software para mantener quieta la grabación aún cuando tengamos el clásico pulso de maraquero. Y sí, puedo confirmar que funciona. Los resultados no son iguales a los que obtendríamos con un estabilizador externo, pero sí parecidos.

El poco provecho que iOS le saca a ese pantallón

Si el iPhone XS Max incluía una pantalla más grande, me interesaba conocer qué tanto provecho le sacaría Apple a ese enorme panel con su sistema operativo. Desgraciadamente es muy poco.

La interfaz de este modelo es idéntica a la del iPhone XS. El mismo número de iconos, solo que con un mayor espacio de separación entre ellos. Otros elementos, como el teclado, también solo aumentan de tamaño, y en algunas apps no optimizadas incluso se llega a ver borroso.

Eso sí, con algunas apps propietarias de Apple se permite la vista de elementos en columnas. Como la app de Mensajes, la de Notas o el menú de Configuración. Pero más allá de eso no hay ningún aprovechamiento real de la enorme pantalla. Hubiera querido ver, por ejemplo, un split view para trabajar con dos aplicaciones de forma simultánea.

Junto con los iPhone XS y XS Max, Apple está estrenando una nueva versión de su sistema operativo iOS, en concreto la versión 12. Como ya hemos repasado, esta actualización viene con mejoras en las notificaciones, en las llamadas de FaceTime (ahora son grupales) y Siri (con su nueva app Atajos).

Apple ha estado insistiendo con entrar en la realidad aumentada, y en iOS 12 ahora la quiere llevar a un nivel superior con la posibilidad de compartir experiencias con otros usuarios e integrando una app para medir elementos reales con la cámara de su teléfono. Considero que a día de hoy no hay una killer app para este mercado, pero quizá la compañía nos esté preparando para el futuro.

La opinión de Xataka México

El iPhone XS Max tiene un diseño extremadamente cuidado, el nuevo color oro lo hace lucir como un verdadero producto premium —como dije unos párrafos atrás— casi luciendo como una pieza de joyería. La pantalla me parece espectacular, tanto en tamaño, calidad y calibración, de los mejores paneles OLED del mercado actual.

En torno al rendimiento, me he quedado un poco confundido, ya que aún cuando el teléfono va como bala, no hay alguna mejora notable ni respecto a la generación anterior ni respecto a otros gama alta de 2018. Sin embargo, esos 7nm de su chip me han dejado satisfecho en el tema de consumo, me gusta que estirando un poco pueda llegar a casi el día y medio de autonomía. Por supuesto, repito mi crítica con el sistema de carga, Apple debería olvidar el ridículo cargador de 5W y no orillar a los usuarios a hacer un gasto adicional para sacarle partido a la carga rápida.

Tambien hay mejora en el sonido y FaceID: sobre el primer apartado las mejoras son muy notables y agradezco que Apple se esté preocupando por un tema que muchos fabricantes han dejado pasar, el segundo solo se notarán las mejoras si lo ponemos lado a lado con su antecesor.

La fotografía creo que es el punto más importante de los iPhone de este 2018, hay pocas mejoras en torno al hardware pero muchas en el software. Pero todo el conjunto convierte a la cámara, una vez más, como la mejor si lo que buscamos solo es apuntar y disparar.

Por el lado del software, pues nos encontramos al mismo iOS que ya todos conocemos, pero me hubiera gustado ver más funcionalidades para sacarle un mayor partido al enorme tamaño este modelo.

En conclusión, el iPhone XS Max es el iPhone más caro en la historia de Apple (de eso no quedan dudas), pero así mismo puedo confirmar que es el mejor iPhone en la historia de Apple. Lo malo de esto es que, aún siendo el mejor smartphone de su ecosistema no significa que sea perfecto.