Galaxy Watch Active2, lo hemos probado: quizás el smartwatch definitivo para Android

Samsung tiene varios años atacando el mercado de wearables. Este 2019 su avance comenzó con el Galaxy Watch Active, pero sorprendió pocos meses después con el Galaxy Watch Active2, sucesor de la primera generación que trajo consigo leves, pero interesantes mejoras.

Hace algunas semanas este nuevo wearable de Samsung llegó a México, y hemos tenido oportunidad de probarlo. Este es nuestro análisis a fondo del Galaxy Watch Active2, quizás el smartwatch definitivo para Android.

Diseño: para hacer ejercicio con estilo

El calificativo Active de este smartwatch de Samsung nos da la idea de un dispositivo, si bien no tosco, con un diseño más deportivo, algo menos estilizado. Pero no, el Active2 tiene un diseño muy cuidado. Nos ha tocado probar la variante de 40mm con cuerpo de acero inoxidable color oro con correa de cuero rosa, y el único detalle "negativo" que mencionar es que quizás el material de la correa no es el idóneo para la actividad física, pero no por eso resulta incómodo.

El diseño es el mismo que el de su antecesor, con lo positivo y negativo de este aspecto. Al ser un reloj en forma, el Watch Active2 es más pesado que otras opciones del mercado más enfocadas al deporte, sin tanto estilo. Sin embargo, tampoco es un factor decisivo o de mucha importancia pues durante las sesiones de actividad física, no resultó molesto.

Además, el diseño per se lo hace resaltar por donde pasa. Por poner un ejemplo, la gran mayoría del tiempo utilizo ropa de tonalidades oscuras (siempre al menos una prenda en color negro), por lo cual el contraste de los colores del Active2 es un detalle que no pasa desapercibido.

Para finalizar este apartado, mencionaremos los dos botones en el lateral derecho. El superior para retroceder durante la navegación y el inferior para abrir el menú de aplicaciones, y que además se puede configurar como acceso directo para lanzar cualquier app de nuestro agrado con dos toques.

En el lado opuesto está un pequeño altavoz que permite tomar llamadas directamente en el smartwatch, y sí, también escuchar música. Quizás no es la característica más funcional, pero que para ciertas ocasiones sirve. Hablaremos más adelante de estas funciones.

Pantalla: una gozada

El panel SuperAMOLED del Active2 merece su propio apartado, ya que, al igual que sucede con la calidad de las pantallas de los smartphones Samsung, brilla por su calidad. En cualquier situación la visibilidad es muy buena, no importando si estamos en exteriores con abundante luz natural impactando directamente, o en interiores, acostados en cama a punto de dormir.

Ya sea que consultemos una notificación o queramos ver cómo vamos de tiempo durante una carrera, la visibilidad del Active2 es excelente. Y, dicho sea de paso, la respuesta del movimiento para la activación del panel también lo es. De la mano de esto, también tenemos que la respuesta táctil es muy buena, a pesar de ser un espacio de apenas 1.2 pulgadas.

En este aspecto también influye mucho cómo el sistema muestra la información, sin saturar la pequeña pantalla, acomodando muy bien los datos concretos. En general, la pantalla, a pesar de ser pequeño, resulta ser suficiente para consultar la información importante cuando es necesario.

Rendimiento: hardware y software en armonía

De la mano del buen funcionamiento de TizenOS (que se nota mucho cómo ha madurado), está la gran optimización de hardware que Samsung ha logrado. Todo resulta en una experiencia fluida, sin ralentizaciones y en general de lo mejor, tanto en funciones básicas con la recepción de notificaciones y ver la hora -porque sí, el Active2 también da la hora-, y otras funciones más en línea con el seguimiento y cuantificación de actividad física.

En este apartado quizás lo que más vale resaltar es la integración del bisel táctil que permite navegar más fácilmente por los diferentes menús del Active2. Aunque no haya una parte móvil física en la esfera, al pasar el dedo podremos hacer scroll por la pantalla, aprovechando el panel para ver contenido sin taparlo con los dedos. Nada más como detalle, al principio cuesta un poco adecuarse a la sensibilidad del bisel, pero es cuestión de un poco de práctica para tomar la media de movimiento.

Siguiendo con el software, el Watch Active2 tiene una interfaz sencilla de entender y adaptarse (con swipe hacia abajo para el acceso directo a las configuraciones de conectividad y a la izquierda para las notificaciones), pero que también puede llegar a ser tediosa, depende de los widgets.

Los widgets son los accesos directos a diferentes aspectos y podemos colocar -casi- tantos como queramos. Deslizando hacia la izquierda desde la pantalla principal podemos acceder al conteo de pasos, la distancia recorrida, las calorías quemadas, cada estadística en un widget dedicado, o bien todas en uno. Esto solo en cuanto a la actividad física, ya que también hay widgets para el clima, para alarmas, para la agenda y el calendario, y en general para casi cada función del smartwatch.

Vale la pena tocar el tema de las notificaciones. Soy un usuario que en smartwatches/smartbands desactivo casi todas las notificaciones, salvo las de Slack, la oficial virtual de Xataka México, Twitter, y llamadas -y eso cuando el dispositivo en mi muñeca permite su vibración con modo silencio en mi smartphone. Con este contexto, puedo decir que las pocas notificaciones que recibí llegaron a tiempo... el 85% de las veces, ya que algunas veces tardaban varios minutos en registrarse en el Active2. En mi opinión personal, no es un aspecto decisivo que haga mejor o peor este smartwatch de Samsung.

Las opciones de personalización del Active2 son vastas, tanto para aspectos como estos accesos directos como para las watchfaces. Existen opciones precargadas, pero también se pueden descargar (ya sea con pago o gratuitas) desde la Galaxy Store infinidad de esferas, para todos los gustos y necesidades. Además, también existe una watchface que permite colocar una foto o imagen personalizada como fondo, por si no fueran suficientes todas las demás opciones.

El compañero ideal para hacer ejercicio

Entrando de lleno al uso del Galaxy Watch Active2 como compañero de ejercicios, nada tiene que pedirle a otros dispositivos del mismo tipo. Es decir, a menos que seas un atleta que hace triatlones y necesites saber el nivel de oxigenación de tu sangre o necesites de un smartwatch que aguante la presión a 100 metros de profundidad bajo el agua, el Active2 es ideal para ti.

Hay una larga lista de ejercicios que el Active2 registra, desde las clásicas caminata, carrera en cinta, correr, hasta pesas, natación, ejercicios HIIT, sentadillas, levantamiento de peso para pecho, para espalda, y más. Entonces, el usuario puede comenzar el registro de actividad de manera manual, buscando la actividad en el menú (o bien con un widget), pero lo mejor es que el Active2 también tiene detección automática de actividad física. No siempre funciona correctamente, pero en general detecta que el cuerpo se mueve y registra actividad física.

El detalle está en que la actividad física debe realizarse por 10 minutos seguidos, entonces el Active2 notificará que ha detectado actividad, y seguirá con el registro. Al terminar, notificará y dará un resumen: en el caso del ejemplo sobre estas líneas fue caminara por 22 minutos de las 6:43pm a las 7:05pm, con 1.56 km recorridos y 69 calorías quemadas.

Por otro lado, el Active2 también notifica cuando se cumple la meta de actividad física (en mi caso 10,000 pasos) previamente configurada, y en ese mismo momento también muestra un resumen de cuántos días de la semana se ha alcanzado la meta, el promedio de actividad y demás datos.

Uno de los detalles más curiosos que vale la pena mencionar es que todo el registro de actividad física se puede consultar directamente en el Active2, es decir que no es precisamente necesaria la app Samsung Health. Sí, la aplicación ayuda a tener mejor vista de la información, y por ejemplo es más fácil ingresar consumo de alimentos para conteo de calorías, agua, café y muchos otros aspectos que el Active2 también puede cuantificar, pero no es totalmente necesaria para sacar todo el provecho del dispositivo.

Aún hay sorpresas, incluida una autonomía sobresaliente

Uno de los aspectos que más disfruté del Galaxy Watch Active2 es que la aplicación nativa de Spotify permite la descarga directa de música. Es decir, no es necesaria la transferencia local de archivos para poder escuchar música en el Active2, sin necesidad de un smartphone. Y sí, cuando un smartphone está cerca y emparejado, se puede controlar Spotify en el móvil desde la muñeca. Además, como ya mencionamos anteriormente, el pequeño altavoz permite escuchar música, ya sea de Spotify, archivos locales o alguna otra plataforma, directamente desde el Active2.

Lamentablemente, conectar un par de audífonos Bluetooth y escuchar música directamente en el Active2 eleva mucho el consumo energético y prácticamente drena la batería en dos días, ambos con uso normal y con sesiones de escucha de música de aproximadamente dos horas.

Ya que estamos en este tema, la autonomía del Active2 es uno de sus puntos más fuertes, logrando alcanzar entre 5 y 6 días de uso moderado. Entiéndase por moderado sin nada de escucha de música directamente en el dispositivo, pero sí con conexión Bluetooth permanente a un smartphone, aunque como ya mencioné, sin muchas notificaciones.

Personalmente pienso que la autonomía del Active2, con todo y su panel SuperAMOLED, es uno de sus aspectos más llamativos, haciendo peligrosa competencia a otros contendientes del mercado con más tiempo y experiencia. Lamentablemente, está el tema de que su carga inalámbrica tarda mucho tiempo (en este caso más de dos horas y media desde el 3%), tal y como deja saber con solo colocarlo sobre la base de carga.

Finalmente, otra función que vale la pena mencionar es la capacidad del Galaxy Watch Active2 no solo de rechazar llamadas sino de contestarlas directamente en la muñeca. Eso sí, es una función que también está presente en otros smartwatches del mercado. Un caso particular para contar durante este análisis, es que en una ocasión estaba lavando trastes y recibí una llamada, entonces en vez de secar mis manos e ir a buscar el teléfono para contestar -a dos metros de mi-, sencillamente contesté directamente desde el Active2 y listo, pude realizar la llamada desde mi muñeca.

Eso sí, tuve que pegar la oreja un par de veces al pequeño altavoz para escuchar claramente lo que mi interlocutor decía, pero fue una llamada rápida, desde la comodidad de mi hogar, que pude atender sin contratiempo gracias a esta curiosa función del Active2. Quizás estando en la calle no sea la mejor opción, pero para ciertas situaciones puede ayudar.

¿El smartwatch ideal?

Tal y como dice el titular de este análisis, el Galaxy Watch Active2 de Samsung puede ser considerado como el smartwatch definitivo para Android. En iOS, a pesar de que es compatible, sabemos que la historia con el Apple Watch Series 5 es muy distinta, con un ecosistema que ha evolucionado a grandes pasos.

Sin embargo, el esfuerzo de Samsung también se nota, tanto a nivel de hardware y, sobre todo, diseño como en software, con un TizenOS que ha madurado mucho, y en poco tiempo, quizás más que WearOS. Junto con estos aspectos, la pantalla SuperAMOLED y la sorpresiva autonomía del Active2 lo colocan en una posición muy privilegiada frente a otros competidores del mercado que quizás se han dormido en sus laureles y no han sabido evolucionar al mismo ritmo.

No obstante, al final, la decisión de cuál smartwatch o smartband es mejor, depende de cada usuarios, dependiendo de gustos, necesidades y posibilidades, sobre todo teniendo en cuenta el precio del Galaxy Watch Active2 es de 7,999 pesos. Lo que no se puede negar es que Samsung ha puesto la vara muy alto para los demás.