Poco más de un año ha pasado desde la presentación del ROG Phone, el primer smartphone para gamers de ASUS y también el primero de su tipo en llegar a México, hace un par de meses. Como lo dijimos en su momento, a pesar del tiempo que ha pasado, la entrada del ROG Phone al mercado nacional es importante porque abre las puertas a este tipo de dispositivos enfocados en los más jugadores.
Es así, que tras unos días de prueba con la bestia de ASUS, por fin contarles cómo se comporta en el día a día, por supuesto, al momento de jugar y en general con todas las tareas cotidianas. Hemos probado el ASUS ROG Phone y esto es lo que pensamos.
ASUS ROG Phone, especificaciones técnicas
Como siempre antes de comenzar un texto de análisis, revisemos las especificaciones del dispositivo. En el caso del ROG Phone el repaso técnico es importante pues hay varios aspectos que vale la pena resaltar.
ASUS ROG Phone | |
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Dimensiones físicas | 158.8 x 76.2 x 8.3 milímetros, 200 gramos de peso |
Pantalla | AMOLED de 6 pulgadas con tasa de refresco de 90 HZ. Protección Gorilla Glass 6 |
Resolución | FullHD+, 1,080 x 2,160 pixeles (402 ppi), aspecto de imagen 18:9. Soporte HDR |
Chipset | Qualcom Snapdragon 845 de ocho núcleos, cuatro personalizados a 2.96 Ghz y cuatro a 1.7 Ghz. GPU Adreno 630 también mejorada para mayor desempeño gráfico |
RAM y Almacenamiento | 8 GB de RAM, 128 GB de almacenamiento no expandible |
Sistema Operativo | Android 8.1 Oreo con capa ROG Gaming X UI de ASUS |
Cámaras | Doble trasera: Principal de 12 megapixeles con apertura f/1.8, DualPixel, autoenfoque por detección de fase (PDAF) y estabilización óptica de imagen (OIS) de cuatro ejes + Ultra gran angular de 8 megapixeles. Frontal: Gran angular de 8 megapixeles con apertura f/2.0 |
Batería | 4,000 mAh con carga rápida HyperCharge de 30W (compatible también con Qualcomm QuickCharge 4.0) por medio de USB Type-C |
Extras | Sistema de refrigeración GameCool 3D Vapor, altavoces estéreo frontales, sensor de huellas trasero, jack 3.5 mm con soporte para audio de alta calidad a 24-bits y 192 kHz, tecnología DTS Sound X |
Precio |
ASUS ROG Phone, unboxing
Primero lo primero, ¿qué viene dentro de la caja del ROG Phone? El empaque de este dispositivo no es nada parecido a lo que vemos en un smartphone tradicional sino que es un prisma hexagonal, pero de lados asimétricos. Para abrir la caja es necesario acostarla y encontrar el seguro magnético en una de sus caras, solo así podremos ver el contenido.
Tenemos el ROG Phone, por supuesto como protagonista en medio del empaque, a su costado derecho está un ventilador desmontable, accesorio que ayudará al sistema de ventilación por cámara de vapor a mantener la temperatura bajo control durante largas sesiones de juego. Finalmente, a la izquierda del dispositivo está otra caja más pequeña en donde están el cable USB Type-C a USB Type-C con recubrimiento de tela y el gran adaptador de corriente con soporte para 30W.
También están presentes los clásicos manuales de inicio rápido y garantías, pero no creemos que sea necesario mostrarlos en las imágenes. Lo que sí vale la pena mostrar es la herramienta de extracción de tarjeta SIM, con el logo de ASUS cuidadosamente grabado. Gran detalle.
Ahora sí, vamos a la acción completa.
Diseño: sorprendentemente elegante
Muy contrario a lo que hubiera imaginado, el ROG Phone es sorprendentemente elegante. Es un smartphone que definitivamente no pasa desapercibido, ya sea por lo brillante de su cubierta trasera (imán de huellas debido a que es de crital) o por lo llamativo del logo luminoso de Republic of Gamers, algo que amas u odias.
Los detalles angulares de la cámara y el sensor de huellas fuera del centro también ayudan a que este dispositivo llame la atención por donde sea que pase. Definitivamente el ROG Phone es un respiro de aire fresco al diseño de los smartphones de hoy en día, al menos en la parte trasera pues en el frontal el dispositivo se queda un tanto atrás al adoptar los ya-no-tan-tradicionales grandes marcos superior e inferior, pero ganando espacio para la introducción de altavoces estéreo.
Finalmente, en cuanto a la ergonomía es curioso que el ROG Phone resulta bastante cómodo de llevar en la mano pues su grosor es de apenas 8.3 milímetros, el mismo que el de por ejemplo el Moto G7 Plus. Eso sí, con un peso de 200 gramos, ligeramente mayor a la media, pero nada demasiado notable a la hora del uso.
Esta comodidad es "curiosa" pues quizás debido a la imagen de las computadoras de la familia ROG, imaginé un smartphone igualmente tosco y de dimensiones sobresalientes. Es un detalle que vale la pena mencionar, el cuidado que ASUS ha puesto al diseño industrial de su dispositivo.
Pantalla: suficiente en calidad, quizás no en tamaño
Hace un par de años, 6 pulgadas se volvieron el estándar para las pantallas de los dispositivos más grandes, pero ahora esta medida comienza a ser escasa, para algunos. Solo debemos voltear a ver a otros dispositivos que, gracias a la adopción de alternativas como el notch o los agujeros en pantalla, aumentan sus diagonales hasta medidas cada vez mayores.
En este contexto, el ROG Phone queda algo corto respecto a la competencia. Si bien la diagonal del panel permite una buena experiencia de uso, tanto cotidiano como de gaming, quizás algunos usuarios extrañarán un mayor espacio de visualización de contenido, sobre todo teniendo en cuenta sus dimensiones. De nuevo, todo queda sujeto a la percepción de cada persona.
Por el otro lado, los aspectos únicos del panel del ROG Phone verdaderamente lo hacen brillar cuando de consumir contenido multimedia se trata, videojuegos incluidos. Poco mencionaremos en esta sección y dejaremos todos los detalles para un poco más adelante. De lo que vamos a hablar es de las curiosas posibilidades de cambiar la tasa de refresco de la pantalla de 60 a 90 Hz con un switch, así como activar o desactivar el HDR, también con un interruptor.
En aspectos más tradicionales, la calidad del panel AMOLED es muy buena, tanto en interiores como en exteriores. La representación de colores es llamativa (sobre todo con el HDR activado), aunque el balance de blancos y el contraste tampoco se quedan atrás. Finalmente, los ángulos de visión quizás podrían mejorar, pues es necesario mantener el smartphone muy de frente para poder apreciar totalmente las bondades del panel.
Desempeño: como era de esperarse, por las nubes
El ROG Phone tiene el Snapdragon 845 en su interior, es decir la joya de la corona de Qualcomm de generación pasada, y no la actual. Sin embargo, presume de una personalización única que le permite alcanzar 2.96 Ghz en sus cuatro núcleos de alto rendimiento, además de que la GPU Adreno 630 también está optimizada para un mejor desempeño en juegos.
De sobra está decir que cualquier tarea cotidiana que pongamos al ROG Phone es resuelta con soltura y sin problemas. Obviaremos esa parte e iremos directo a lo pesado, al desempeño en juegos, para lo que realmente está hecho este dispositivo. Primero, vamos a las pruebas sintéticas, para darnos una idea en números del poder del Snapdragon 845 personalizado.
Como podemos ver, el ROG Phone se queda a unos pocos pasos de superar la barrera de los 300 mil en Antutu, con 293,114 puntos nada despreciables. De acuerdo con la prueba, esta puntuación es superior al 70% de los dispositivos que alguna vez han hecho el test. Más llamativo es que la optimización de la GPU logra superar al 71% de usuarios.
Por otro lado, Geekbench arroja 2,519 puntos y 9,462 puntos en las pruebas de un núcleo y multi-núcleos, respectivamente. Con motivos de comparación, dejamos una tabla con estos resultados estos obtenidos por el ROG Phone, frente al Pixel 2 XL (con Snapdragon 835) y Xiaomi Mi 9 (con Snapdragon 855) en las mismas pruebas.
Pixel 2 XL (Snapdragon 835) | ASUS ROG Phone (Snapdragon 845 personalizado) | Xiaomi Mi 9 (Snapdragon 855) | |
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Antutu | 201,438 puntos | 293,114 puntos | 369,329 puntos |
Geekbench 4 | 1,761 puntos single-core; 6,118 puntos multi-core | 2,519 puntos single-core; 9,462 puntos multi-core | 3,483 puntos single-core; 10,717 puntos multi-core |
Las diferencias entre el SD835 y el SD845 custom son significativas, mientras que entre este último y el SD855 la distancia es evidente, pero no tan pronunciada como entre los dos primeros. Esto deja en claro, al menos en números, que la personalización de la frecuencia del reloj del ROG Phone verdaderamente tiene un efecto en su desempeño. Lo cual en realidad se nota al jugar.
Modo X y software de optimización para gaming
El desempeño del ROG Phone en juegos es notable, pero para las ocasiones en las que se necesita mayor potencia existe el Modo X. Este optimiza el hardware y elimina el procesamiento en segundo plano de aplicaciones para enfocarse en la experiencia de juego. Su activación puede ser de dos maneras: mediante el toggle en la barra de accesos directos o bien oprimiendo los laterales del dispositivo.
Sabremos que se activa el Modo X por la animación en pantalla y el círculo rojo alrededor de los iconos de aplicaciones. Además, el logo trasero se enciende y comienza una secuencia continua de cambio de colores, misma que puede personalizarse desde el Centro de Juegos. Este es el otro apartado que ayuda a la mejor experiencia de juego, el software optimizado.
Desde este apartado se pueden configurar aspectos como el 'Genio de juegos', un asistente durante las sesiones de gaming que hace más sencillas tareas como transmisiones y grabaciones de pantalla; la sensibilidad de los Air Triggers, los gatillos táctiles laterales, y en qué juegos se activan; la velocidad del ventilador adicional cuando está conectado, y la "Iluminación Aura", es decir la iluminación del logo trasero.
Este es uno de los aspectos más completos y divertidos de configurar. Existen opciones desde mantener siempre encendido el logo ROG hasta que haga ciertas secuencias de cambio de color, tanto en el Modo X como con pantalla encendida o en reposo. La iluminación durante la carga y por supuesto como LED de notificaciones también es posible, configurando un color para cada aplicación instalada.
Experiencia gaming
Ahora sí, vamos a lo más importante del ROG Phone: la experiencia gaming. Antes de entrar de lleno a los detalles, debo confesar que no soy una persona que use regularmente el smartphone para jugar, pero el ROG Phone logró cambiar eso. Es decir sí, tenía que jugar para poder probar sus capacidades y contar cómo se comporta durante las sesiones, pero en verdad la experiencia es tan buena que más que un deber, jugar en el ROG Phone se convirtió en lo que debe ser: un placer.
Comenzando por la pantalla, la experiencia de juego es muy placentera. Como ya mencioné, la representación de colores, contraste y brillo son más que adecuados. Ojo, jugar en este panel AMOLED con tasa de refresco de 60 Hz es una experiencia buena, pero para sacar mayor provecho de la tecnología del ROG Phone es necesario activar el refresco a 90 Hz y el HDR, así la experiencia mejora de gran manera. Detalle importante de mencionar: durante mi experiencia de uso, 60 o 90 Hz no hacen gran diferencia en tareas cotidianas, pero sí al momento de jugar.
Buena imagen, pero ¿qué tal el sonido? Excelente. Los altavoces estéreo tienen una potencia y calidad que sin temor a equivocarme puedo asegurar que es la mejor del mercado actual. El "Asistente para audio" (es decir el ecualizador del sistema) permite una amplia capacidad de configuración así que vale mucho la pena tomarse un tiempo para jugar y mover los interruptores hasta encontrar el sonido perfecto.
La calidad de sonido complementa muy bien la experiencia visual, pero no se queda ahí. De hecho, de manera personal, disfruté más las capacidades de personalización de sonido del ROG Phone para escuchar música -tanto inalámbrica como alámbricamente gracias al DAC integrado. El ROG Phone también debería ser considerado una joya para los amantes del buen sonido.
El ROG Phone se ve bien, se escucha aún mejor, pero ¿qué tal el desempeño per se? Suficiente... en la mayoría de ocasiones. Vamos por partes. Jugar en el ROG Phone sin activar el Modo X es posible, sin complicaciones, son muy pocos los casos en los que vemos ralentización o lag. Los tiempos de carga son breves y el calentamiento del dispositivo es casi imperceptible, aún en sesiones largas, alrededor de una hora.
Entonces, ¿para qué sirve el Modo X? Recordemos que soy un jugador casual, así que la experiencia "simple" ha sido suficiente para mi. Sin embargo, para aquellos jugadores hardcore que detestan los tiempos de carga y el más mínimo ralentizamiento es que este modo especialmente para jugar está pensado. Al activar el Modo X tenemos tiempos de carga mucho menores y un desempeño general más fluido, sobre todo en partidas en línea, aspecto en donde sí noté gran mejoría.
Sin embargo, este modo tiene su desventaja y es que la temperatura del ROG Phone se eleva de manera más notable. Es entonces cuando sale a la palestra el ventilador incluido, que se conecta en los puertos USB Type-C laterales (no aptos para carga, cabe mencionar). Eso sí, el ventilador también merma la autonomía del ROG Phone, pues toma energía del dispositivo para su funcionamiento. De esto hablaremos más adelante.
Hasta aquí todo lo positivo del desempeño del ROG Phone, a todas luces una poderosa bestia. La parte negativa es que en algunas ocasiones, durante actividad cotidianas, el dispositivo no se comporta como debiera, por ejemplo el botón de desbloqueo no activa la pantalla al ser presionado o después de muchos intentos con el sensor de huellas, el teclado para introducir la contraseña no responde. Son situaciones muy puntuales, pero que viendo el desempeño gráfico no deberían suceder. ¿A qué se deben? Quizás la optimización del software debería trabajarse más.
Autonomía: una carga verdaderamente rápida
4,000 mAh dan para mucho, generalmente, pero cuando se trata de un smartphone que para cierta tarea específica necesita gran potencia, no tanto. En el uso con tareas cotidianas, el ROG Phone no tiene problemas para ofrecer hasta casi dos días de autonomía, con uso ligero claro está. Con uso más intenso, sin problemas un día completo de tareas.
En el caso del uso ligero (en cuanto a tareas, redes sociales y música esporádica, más que a tiempo) 6 horas y media de tiempo de pantalla no son nada despreciables. Es importante mencionar que una hora de ese tiempo fue de juego y es con el gaming que vemos cómo la batería comienza a agotarse a un ritmo constante, pero sin caer en un drenado extremo, sobre todo cuando activamos todos los gimmicks para jugar.
La autonomía del ROG Phone no está mal, pero lo verdaderamente sorprendente es su velocidad de carga. Y no es para menos con una potencia de 30W gracias a la tecnología HyperCharge de ASUS. El tiempo de carga promedio es de una hora y 20 minutos de 5% a 100%, con un uso medio del móvil durante el proceso, entonces podemos deducir un tiempo algo más recortado sin uso del dispositivo.
Un detalle curioso de mencionar es que en una hora se carga casi el 90% de la capacidad de la batería, pero el restante tarda un poco más de lo "normal". Sin embargo, es una técnica conocida y ya empleada por otros fabricantes que responde al cuidado de la batería, adaptando la energía que pasa al dispositivo en relación a qué tan llena está su batería.
Finalmente, otro detalle curioso. Como se puede ver por las fotos, el puerto USB Type-C del ROG Phone no está en el centro del polo inferior sino que se posiciona en el extremo derecho (viendo el móvil con la pantalla de frente). ¿Por qué? ASUS tendrá sus razones, pero es gracioso intentar conectar el cargador y que "no se pueda" de tan acostumbrados que estamos actualmente a conectar el cable al centro de casi cualquier smartphone.
Y lo demás
El ROG Phone no es un smartphone como los demás. Con su enfoque principal en el gaming, así es como fue analizado, dejando un poco de lado otros aspectos no tan notables. Sin embargo, por supuesto vale la pena mencionarlos, comenzando con la cámara. Seamos sinceros, la cámara del ROG Phone no está a la altura de la gama (por potencia y precio) en la que se desenvuelve.
De hecho, quizás está un año por detrás de sus competidores directos, ya que incluso en tomas sencillas no logra capturar las tomos como quisiéramos -o debería. Dejamos a continuación algunos ejemplos de fotografías con el ROG Phone, todas en modo automático.
En estas primeras dos fotos, la captura de detalle y colores es escasa. Se podría decir que las imágenes se ven planas, sin contraste. En el caso del gatito, la captura de detalle en su hocico se ve bien, pero parece ser que el ROG Phone olvidó darle el mismo tratamiento al resto de la escena.
En las dos siguientes imágenes tenemos un casi nulo balance de blancos, resultando en tomas blanquecinas. Y sí, limpié las lentes y enfoque en ciertas partes para que no se viera de esta manera, pero no resultó. Además, en el caso de la toma con el lente gran angular, vemos cómo en los costados los objetos se deforman, efecto que sí, está presente en casi todos los lentes de este tipo, pero en este caso es muy notable la distorsión.
Finalmente, la captura de detalle es muy pobre cuando se va la luz. No hace falta explicar mucho más.
Por otro lado, tenemos el tema de la capa de personalización. Ya quedamos que el software para gaming es en verdad bueno, pero el tema del software cotidiano debe pulirse para una mejor integración y así evitar problemas como los mencionados con el sensor de huellas. Y ya que hablamos de este componente, no es tan fiable como debería, con un rango de errores de 4 de cada 10 intentos de desbloqueo. Además de que no detecta bien el swipe hacia abajo para desplegar la barra de notificaciones.
ASUS ROG Phone, la opinión de Xataka México
Tal y como dice el título de este artículo, el ROG Phone no decepciona en cuanto a potencia y añadidos para los que gustan de jugar, sobre todo aquellos seguidores de ASUS, pero no es un smartphone para todos. A un año de su presentación y con sucesor en camino, el ROG Phone tiene un escenario difícil en México, pero eso no quita que sea una apuesta interesante y que más de uno se atreva a apostar por el, por amor al arte de jugar (y la marca).
Pero, por el otro lado está que por el mismo precio, o hasta menos, se puede conseguir un smartphone de generación actual (con la mejora técnica que eso representa) con una mejor cámara. Eso sí, se perderán todos los añadidos de gaming, pero no la potencia "nativa" de un procesador más reciente. Son unas por otras.
El ROG Phone es un buen primer paso para los smartphones especializados en los juegos en México. Tiene aspectos por pulir, pero también marca el precedente de cómo otros fabricantes con estas apuestas deben proceder en el mercado mexicano. Ese reconocimiento nadie se lo podrá quitar a ASUS.
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